Costa Rica es el principal destino de migrantes nicaragüenses que huyen de la crisis política, pero también que buscan oportunidades de trabajo y mejorar las condiciones de vida.
as relaciones entre Costa Rica y Nicaragua dieron un giro inesperado. El gobierno del presidente Daniel Ortega retiró el martes a su embajador en San José, Duilio Hernández, después de cuatro años en su cargo, informó el periódico local La Nación.
La información también fue confirmada a la Voz de América por el canciller costarricense Arnoldo André Tinoco por medio de un texto en WhatsApp, sin dar detalles sobre las razones que llevaron a la medida.
El diario La Nación informó que Ortega habría designado como encargado de negocios a Valdrack Jaentschke, quien recientemente había estado como embajador extraordinario de Nicaragua en Honduras, durante un corto periodo de tiempo.
Reportes de prensa indican que Jaentschke ha cumplido pequeños periodos de tiempo en varios sitios representando a Nicaragua, entre ellos ha sido embajador Antigua y Barbuda y Haití.
La decisión de Ortega se da a menos de una semana después de que un grupo de parlamentarios latinoamericanos de izquierda intentaran ingresar por la frontera de Costa Rica a Nicaragua para corroborar la situación de los reos políticos, sin embargo, migración les negó el paso.
“Pusieron militares en la frontera y tenemos información civil que hay un despliegue militar; le transmiten a la policía migratoria que se nos niega el ingreso y nos dicen que no nos acerquemos, hay una actitud intimidatoria y amenazante de la dictadura, estamos frente a un escándalo de proporciones enormes”, dijo el diputado Mariano Rosa, coordinador de la Comisión Internacional al medio digital Nicaragua Actual.
Costa Rica sin enviar un diplomático
Recientemente el presidente Rodrigo Chaves asumió la presidencia de Costa Rica y a diferencia de su antecesor, Carlos Alvarado -que mantenía una relación distante con Managua-, afirmó que analizaba la posibilidad de enviar un diplomático a Nicaragua, no obstante, después declinó debido a que el gobierno de Ortega ocupó la sede en Managua de la Organización de Estados Americanos (OEA).
Costa Rica ha sido un país clave para los nicaragüenses que huyen de la crisis política que vive el país centroamericano desde el 2018, pero también para quienes buscan oportunidades laborales.
Los nicaragüenses representan el 92 % del total de peticiones de refugio en Costa Rica. Se espera que al cierre del 2022 habrán en Costa Rica 80.000 refugiados nicaragüenses, de acuerdo a datos divulgados por la directora de Migración, Marlen Luna, en una comparecencia ante legisladores en la que reveló que la dependencia está “desbordada”.