Las autoridades españolas dieron a conocer que las 13 víctimas que murieron en un incendio en una discoteca de Murcia, sufrieron asfixia, quemaduras y traumatismo.

Agregaron que médicos forenses del Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses de Murcia, se encargaron de realizar parte de las investigaciones.

Lea: DICTADURA ENCARCELA AL PADRE ALVARO TOLEDO DE ESTELÍ

Asimismo, medios de comunicación en España apreciaron el siniestro como el más mortífero en una discoteca en los últimos 33 años.

También los investigadores confirmaron que las víctimas mortales son de nacionalidades nicaragüense, colombiana y ecuatoriana.

Los nicaragüenses que murieron en el incendio por asfixia son: Erick Hernández, de 30 años, su hermano Sergio Hernández, su madre Martha Hernández de 60 años, y Orfilia Landón, pareja sentimental de Erick, inclusive se menciona el fallecimiento de Tania y Jhon, también nicaragüenses.

Gobierno de Murcia se hará cargo de la repatriación de los cuerpos que murieron por asfixia

El Gobierno regional de Murcia, comunicó que se hará cargo de los gastos de las familias que no puedan asumir los pagos del entierro o repatriación de los cuerpos.

Tras el examen en el Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses de Madrid, la policía ha dado por terminada la labor de identificación de las 13 víctimas, que, en la mañana del pasado domingo, perdieron su vida entre las llamas en la discoteca Fonda Milagros por asfixias y quemaduras.

BOMBEROS TRABAJARON PARA APAGAR LLAMAS DE INCENDIO EN ESPAÑA

“Los bomberos siguen trabajando en el lugar y no se descartan nuevas víctimas”, revelaron los servicios de rescate.

El fuego, que se declaró hacia las 06 horas de la mañana (04 horas GMT) en la discoteca Teatre, ubicado en el barrio de Atalayas, era de “extrema gravedad”, dijo Ballesta a la prensa desde el lugar del siniestro.

Lea Más: “ORFANDAD INTERNACIONAL OBLIGA A LA DICTADURA A BUSCAR AMPARO EN RUSIA”, DICE EXPERTO

Los bomberos que llegaron al lugar a las 07 horas lograron sofocar el incendio en menos de una hora, pero “aún quedan cuerpos por sacar” de entre los despojos, una tarea complicada dado el “riesgo” de derrumbe”, precisó el regidor.