En ocasión al día de Navidad, que se celebra este lunes, 25 de diciembre, monseñor Silvio Báez, obispo auxiliar de Managua, basó su homilía en el Evangelio de San Juan que habla de la palabra creadora de Dios en el Génesis.

Desde la iglesia Santa Agatha, en Miami, Estados Unidos, el jerarca católico afirmó que «la palabra eterna de Dios es soberana y omnipotente, pero nunca se impone ni atenta contra la identidad de las cosas y la libertad de los seres humanos».

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Lamentó, además, que en la actualidad existen personas «impermeables a la palabra de Dios, empecinadas en rechazar su luz y su verdad. (…) Como dice el evangelio de hoy —en San 1:11—, la Palabra ha venido a los suyos pero no la han recibido».

A la afirmación anterior y en referencia a la represión que sufren distintos países a causas de regímenes autoritarios, el prelado dijo que «nunca podrán acoger la palabra de Dios los agresivos y los crueles, que con sus palabras y acciones hieren, humillan, provocando dolor y actuando con violencia».

Monseñor Báez: «Los agresivos y los crueles nunca podrán acoger la Palabra de Dios»
Monseñor Báez: «Los agresivos y los crueles nunca podrán acoger la Palabra de Dios»

También recaló que los opresores que se imponen por la fuerza «viven cerrados (…) arrebatando la libertad y la dignidad de los demás»; por tanto aseguró que estos «nunca serán iluminados por la Palabra de Dios, que es fuente de diversidad armoniosa, quienes a toda costa quieren imponer un pensamiento único, anulando y sometiendo».

«Alejados de la luz quienes aman las palabras mentirosas»

El obispo, que desde el 2018 vive un exilio forzado por la persecución que ha sido victima por parte del régimen de Daniel Ortega, hizo hincapié que los opresores «viven alejados de la luz de la Palabra de Dios, amando las palabras mentirosas que deforman la realidad en favor de sus intereses, (…) creando tristeza y esparciendo en el mundo desilusión y desesperanza».

Sin embargo, manifestó que «a diferencia de estas palabras humanas, oscuras y destructivas, la Palabra de Dios es siempre fuente de vida y de libertad, principio de comunión en la diversidad y fuerza de consuelo y de esperanza».

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«A pesar del rechazo, la Palabra de Dios no se ha escondido. Tiene una historia, cuyo punto culminante es descrito en el evangelio de hoy con estas solemnes palabras: “La Palabra se hizo carne y habitó entre nosotros” (Jn 1,14).», alentó el religioso.

Además señaló que «la pequeñez», ni las rebeldías de los seres humanos no escandalizan a Dios ni lo mantienen alejado. «—Dios— nos ama a cada uno como somos, nos invita a acogerlo sin temor. Solo nos pide confiar en él. Ha venido para ser nuestro hermano y llenar de felicidad y de sentido nuestra vida», dijo.

El religioso lamentó que en la actualidad existen personas «impermeables a la palabra de Dios». Foto: Darío Medios / captura de pantalla
El religioso lamentó que en la actualidad existen personas «impermeables a la palabra de Dios». Foto: Darío Medios / captura de pantalla

«La Palabra eterna nació como un niño que no sabe hablar para enseñarnos que cuando Dios parece callar es que nos está hablando de otra manera.  Nació llenando de luz la noche para que no nos desanimemos ante las dificultades y los fracasos, asegurándonos que él siempre estará allí, sufriendo y luchando con nosotros», concluyo la homilía dl líder religioso.

La Navidad de este 2023 llega en un contexto de represión y asedio en contra de los nicaragüenses, en especial contra la Iglesia católica, que se ha recrudecido desde las protestas sociales iniciadas en abril del 2018, y que ha dejado decenas de presos políticos —incluyendo monseñor Álvarez— , así como exiliados y desterrados.