Monseñor Álvarez pasará su segunda despedida de año como prisionero político de Ortega

Monseñor Rolando Álvarez Lagos, obispo de la Diócesis de Matagalpa, pasará por segundo año consecutivo la despedida de año como prisionero político del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo.

Al igual que las fiestas de Navidad, el religioso no podrá estar al lado de su feligresía, tampoco se sabe si las autoridades del Sistema Penitenciario Jorge Narro, en Tipitapa, le permitieron visita familiar.

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Consultado por Darío Medios Internacional, un sacerdote de la Diócesis de Granada, exiliado en Estados Unidos, expresó, en condición de anonimato, que es «lamentable» la situación de monseñor Álvarez, «preso por ejercer su ministerio pastoral y denunciar lo incorrecto y lo que atenta contra la ley de Dios».

«Monseñor Álvarez es inocente y la gracia de Dios está con él; por eso le pido a Dios que le haga sentir al obispo que no está solo, porque aunque otros sacerdotes lo han abandonado, la mayoría de los nicaragüenses estamos con él y oramos por él», agregó.

En referencia a las recientes detenciones en contra de sacerdotes, el religioso señaló que hasta por pedir una oración por monseñor Álvarez se está convirtiendo en un delito ,«que no es más que el odio expresado por la tiranía —de Daniel Ortega—».

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Subrayó, además, que esta la ola represiva en contra de la Iglesia, la dictadura orteguita ha querido borrar el nombre de monseñor Álvarez, «porque al igual que el demonio les revuelve el estómago al escuchar el nombre del obispo».

«Todas estas acciones nos confirman que estamos siendo gobernados por una dictadura satánica que repela todo lo sagrado que viene de Dios, perdiendo así la vergüenza», refrió.

Monseñor Álvarez, secuestrado desde el cuatro de agosto de 2022

El prelado y crítico de la dictadura de Nicaragua fue privado de su libertad el cuatro de agosto de 2022, para luego, el 19 del mismo mes, sacarlo por la fuerza de la Curia Episcopal de Matagalpa para reducirlo a casa por cárcel.

El nueve de febrero de este año, el mismo dictador Daniel Ortega informó que monseñor Álvarez había sido recluido en «La Modelo», luego de negarse a ser desterrado a Estados Unidos, junto a 222 exreos políticos.

En tiempo récord, el 10 del mismo mes, la justicia orteguista condenó al prelado a 26 años de prisión, más la pérdida de su nacionalidad, tras acusarlo por el supuesto delito de conspiración a la patria.

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Solo en dos ocasiones, en lo que va del 2023, la dictadura orteguista ha exhibido fotografías del jerarca católico, afirmando que el prelado goza de privilegios y está en celdas preferenciales, a pesar que se ha denunciado que Álvarez sufre trato crueles e inhumanos.

En el tiempo que lleva secuestrado el obispo de Matagalpa, organismos de derechos humanos y opositores siguen demandando su libertad, en medio de una escalada de detenciones de religiosos, incluyendo el obispo Marcos Díaz, vicario de la iglesia Santo Tomás Apóstol en Puerto Corinto, detenido sin orden Judicial la noche del jueves, 28 de diciembre.