CEN llama a vivir en “esperanza” pero mantiene actitud timorata ante la persecución religiosa

Durante el transcurso del año 2023 la persecución y censura impuesta por la dictadura familiar de Daniel Ortega y Rosario Murillo a la iglesia católica de Nicaragua no ha cesado, a pesar del silencio y las expulsiones de sacerdotes, frente a esto, la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN) llamó a vivir con “esperanza” el tiempo de adviento.

Sin embargo, a pesar que el episcopado en su mensaje difundido el pasado 24 noviembre, insta a la población a celebrar las actividades religiosas-populares en el “ceno del hogar” y “fortalecer los lazos del amor”, estos mantienen su actitud timorata ante los abusos del régimen contra la feligresía, así mismo, siguen guardando silencio “sepulcral” ante el encarcelamiento arbitrario de Monseñor Rolando Álvarez.

“Cada discípulo debe redescubrir el llamado a florecer como testigo del Evangelio; dando buenos frutos de caridad, fraternidad y unidad, guiado por el Espíritu Santo que le lleva a experimentar la auténtica conversión a Jesús”, señala el comunicado.

La familia como “primera escuela del evangelio”

No obstante, exhortaron a las familias “como primera escuela del evangelio” e “iglesia doméstica”, a redescubrir virtudes que “cada uno puede vivir desde el señor, siendo testigo de Jesucristo: camino, verdad y vida”, animando también, a sentirse “misioneros” de Jesús.

“Les exhortamos a participar y aprovechar lo que la iglesia nos ofrece para revivir este hermoso tiempo de esperanza. La eucaristía, la corona de adviento, la Novena del Niño Dios, las posadas, el colocar los pesebres en los hogares, celebrar la Novena de la Purísima, la virgen de Guadalupe y demás expresiones de piedad popular”, señaló la CEN.

La posición de autocensura que mantiene la CEN y el Cardenal Leopoldo Brenes ante el encarcelamiento de Monseñor Rolando Álvarez, las violaciones contra la libertad de credo, así como la expulsión de la comunidad Jesuita y demás órdenes religiosas, ha generado suspicacia dentro del clero católico, esto, según lo expresado por diferentes seminaristas que han expresado sus molestias de manera anónima a medios de comunicación.

Colegios religiosos bajo hostigamiento

El Estado es hostil hacia la Iglesia Católica, por ejemplo, según la Unidad Sindical Magisterial (USM), diversos colegios parroquiales de Nicaragua están custodiados en sus diligencias finales del ciclo académico 2023, por agentes de la Policía sandinista vestidos de civil.

“Los policías llegan a los contornos de los centros educativos católicos a bordo de motos y permanecen en el sitio por varias horas incluso durante las homilías ante la mirada de los ciudadanos, para transmitir pánico a los niños, adolescentes y padres de familias”, denunció la USM.

Igualmente, representantes de organizaciones de derechos humanos consideran que la actuación de la Policía es sumamente peligrosa porque aparte de cercenar la libertad religiosa, violenta los derechos de los estudiantes a participar libremente en sus actividades de fin de año.

Monseñor Álvarez cumple 57 años de edad bajo secuestro

Por otro lado, el obispo de la diócesis de Matagalpa, monseñor Rolando José Álvarez Lagos, a quien la dictadura le mantiene secuestrado en el sistema penitenciario “La Modelo” de manera ilegal por orden del régimen Ortega-Murillo, arribó este lunes 27 de noviembre a sus 57 años de edad, cumpliendo además, ya un año y tres meses confinado por razones políticas.

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“No digamos felicidades, digamos excelencia monseñor Rolando en mis oraciones está y en este día las intensifico. Que se vea en cada red el cariño hacia él. Monseñor Rolando mañana 27 de noviembre cumple un año más de vida. Lo pasará en una celda. Ya son más de 470 días encarcelados injustamente. Su delito: un gran amor por Dios, por su Iglesia y por su pueblo de Nicaragua”, expresó el Padre Erick Díaz.

De igual manera el religioso agregó que monseñor Álvarez “sigue dándonos ejemplo de amor a su pueblo desde el silencio, en su condición sabemos que ora por nosotros desde donde está, no olvidemos a quien no nos ha olvidado, que hoy las redes sociales se desborden en acción de gracias y muestras de cariño hacia nuestro Pastor”.

El obispo de Matagalpa ha dado ejemplo al país y al mundo entero de dignidad, lucha y valentía en febrero de este año fue condenado a más de 26 años de prisión de manera ilegal acusado de los supuestos delitos de traición a la patria y propagación de noticias falsas, por el simple hecho de predicar el mensaje de Dios y estar al lado de los oprimidos y necesitados.

Una condena que se dio tras no aceptar ser desterrado de Nicaragua con los 222 presos políticos que el régimen envió a EEUU, meses después se conoció que hubo un intento de negociación para excarcelarlo, sin embargo, no aceptó salir de Nicaragua por segunda ocasión mostrando el valor y coraje que lo caracteriza.