Tomografía 1

Imagen cortesía CONFIDENCIAL

Confidencial tiene en su poder 19 tomografías realizadas en el Lenin Fonseca, de las cuales 15 corresponden a pacientes heridos con armas de fuego en la cabeza. Al menos ocho de ellos fallecieron, según los médicos consultados. Sus identidades han sido confirmadas por este medio de comunicación y el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh).

 

Las tomografías revelan disparos precisos en las frentes, parietales, temporales y occipitales de las víctimas. Otros en las regiones cervicales y del tórax. Cráneos estallados, desplazamientos de la línea media cerebral, inflamaciones y hemorragias graves. Salvarse de esas lesiones es muy difícil.

 

Los impactos de bala presentan en su mayoría orificios de entrada y salida. Trayectorias que dejan una estela de destrucción en la masa cerebral. En las tomografías pueden verse como un surco gris abierto por el proyectil que deja, en algunos, esquirlas de plomo o de hueso desperdigadas. Balas poderosas.

 

Confidencial consultó a un médico especializado en balística para obtener su análisis sobre las tomografías del Lenin Fonseca. “Según lo que veo, disparaban con ‘precisión científica’: ¡directo a matar!”, sostiene el doctor, que solicita mantener su identidad en el anonimato por seguridad. Este médico vio muchas heridas parecidas cuando prestaba servicio durante la guerra en los ochenta.

 

“Son balas de alto poder. Son fusiles, armas de guerra. Estas no son pistolas”, asegura un experto en balística.

 

Las trayectorias de balas de arriba hacia abajo hacen conjeturar a las víctimas y sus familiares de que la policía usó francotiradores. En Estelí, las madres de Orlando Pérez y Franco Valdivia sostienen que los tiradores estaban ubicados en la sede de la alcaldía municipal de esa ciudad. Ambos universitarios fueron heridos de forma mortal en el tórax y en el rostro respectivamente.

 

El informe preliminar de la CIDH recoge denuncias sobre la presencia de francotiradores en el Estadio Nacional Dennis Martínez y en Matagalpa. El organismo concluyó que “estos graves hechos indican la posibilidad de que se habrían registrado ejecuciones extrajudiciales”.

 

Fuente: Confidencial