Recientemente durante una misa de Semana Santa el Cardenal Leopoldo Brenes, se mostró satisfecho porque asegura que hay más sacerdotes al servicio de la Arquidiócesis de Managua, detallando un número más significativo de religiosos
“118 sacerdotes encontré en el 2005, de estos 118, prácticamente 8 han partido al encuentro del Padre. Pero yo le pedí al Señor también que me diera la gracia que al celebrar mis 75 años de vida y 50 años del ejercicio del sacerdocio ministerial (…) pudiéramos ofrecerle al Señor un racimo mayor de sacerdotes (…) y tengo la alegría de poder decirles que El Señor conmigo ha estado grande y es motivo de alegría para la Arquidiócesis, tenemos incardinados en la Arquidiócesis 204 sacerdotes”, expuso el religioso.
Recientemente se consagraron diáconos más de 20 seminaristas, quienes se esperan sean ordenados sacerdotes en agosto de este año, por lo que la cifra de sacerdotes dentro de Nicaragua va aumentar, por lo que los movimientos sacerdotes sigue activo a pesar de la persecución religiosa por parte de la dictadura sandinista.
No habló de sacerdotes expulsados
Durante la Eucaristía, el cardenal Brenes evitó referirse a los sacerdotes exiliados y no se sabe con precisión si entre 204 sacerdotes que le sirven a la Arquidiócesis de Managua, están los sacerdotes que han sido expulsados por el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
Durante la misa el purpurado hizo un pedido a las parroquias y a los mismos sacerdotes y es orar por las vocaciones a la vida sacerdotal y adelantó que con las próximas ordenaciones previstas a lo largo del año “el Señor nos sigue bendiciendo”.
La Arquidiócesis de Managua está integrada por 118 parroquias dividas en tres departamentos, Managua, Carazo y Rivas, dentro de estas están las iglesias de Masaya, que han sido duramente golpeadas por la dictadura y sacerdotes se han visto obligados a dejar sus parroquias, incluso sean exiliado.
Confrontación contra la Iglesia
En reiteradas ocasiones el dictador nicaragüense Daniel Ortega ha despotricado contra la iglesia católica en Nicaragua, incluso contra el mismo Papa Francisco, puesto que en una ocasión se mostró molesto por la forma en que se ordenan sacerdotes.
“Si vamos a hablar de democracia (…), el pueblo debería elegir en primer lugar a los curas del pueblo, luego a los obispos, a los cardenales, y tendría que haber una votación en el pueblo católico en todas partes para que se elija también al papa por voto directo del pueblo”, indicó Ortega. “¡Qué sea el pueblo el que decida y no la mafia que está organizada en el Vaticano!”, enfatizó.