Redacción Radio Darío

La Policía Nacional de Nicaragua se ha convertido en el principal aparato represor del gobierno de Daniel Ortega desde abril 2018, criminalizando a manifestantes, activistas, defensores de derechos humanos y periodistas por cuestionar y exigir la renuncia del mandatario nicaragüense tras ordenar los asesinatos de manifestantes que ascienden a 325 según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).

 

En una entrevista a Radio Darío, la socióloga e investigadora Elvira Cuadra, desde San José de Costa Rica dijo a Radio Darío que el daño que Daniel Ortega le ha cometido a la policía nacional es irreparable.

 

“El daño que el gobierno le ha causado a la institución (Policía) es irreparable, amerita un proceso de transformación. Va a ser un proceso complejo donde se va a tener que trabajar una propuesta de cambio mediante un nuevo gobierno”, dijo la también socióloga Elvira Cuadra.

 

La investigadora nicaragüense dice que hay oficiales de la policía seriamente comprometidos en los crímenes de lesa humanidad y en todas las acciones de represión que se han cometido desde abril 2018  a la fecha en contra de manifestantes nicaragüenses.

 

El 5 de julio del pasado año Heather Nauer portavoz del departamento de estado de los Estados Unidos anunció que su gobierno sancionó mediante la Ley Magnitsky  a cuatro funcionarios nicaragüenses, entre ellos, Francisco Díaz, comisionado general y jefe de la policía en Nicaragua.

 

“Bajo el mando de Francisco Javier Díaz Madriz, la Policía Nacional de Nicaragua ha participado en graves abusos de los derechos humanos contra el pueblo de Nicaragua”, dijo Nauer.

 

Elvira Cuadra reflexiona que la policía nacional dejó de cumplir con sus funciones establecidas en las constitución, pero también en la misma Ley de Policía, que tienen que ver con la delincuencia común y crimen organizado, para dedicarse a detener las movilizaciones y protestas ciudadanas.