En los 21 municipios de los departamentos de Madriz y Nueva Segovia, los partidos de “oposición ficticia” PLC, ALN, PLI y APRE, acusados de cómplices de la dictadura de Daniel Ortega por defraudar comicios electorales en el país,  han inscrito como candidatos a militantes del Frente Sandinista, fallecidos y gente en el exilio,  porque sus simpatizantes han desertado.       

Por ejemplo, al Partido Liberal Constitucionalista (PLC) le ha costado reorganizar su partido en los nueve municipios que conforman Madriz, donde dos viejos militantes, el ingeniero Franklin Marín y el abogado Leyvi Valenzuela, que fungieron como presidentes del Consejo Electoral departamental (CED) renunciaron a su cargo en elecciones pasadas, mientras el recién nombrado presidente departamental de ese partido, Félix Guzmán, abandonó su cargo y se fue a Estados Unidos.  

En tanto, el candidato a alcalde que lleva para el municipio de Somoto, cabecera del departamento de Madriz, es el humilde campesino Santos Abraham Cerros, habitante de la remota comunidad conocida como Uniles, y quien dice que aceptó que usaran su nombre “para salvar a su partido”. Reconoce que no tiene dinero para hacer su campaña y que los votantes de su municipio están muy “huraños” con el actual proceso. “Se ve que la gente no quiere apoyar”, admite.  

Militancia cero  

Decenas de opositores, principalmente de las zonas rurales, que aún permanecían después de abril del 2018 en los 21 municipios de Madriz y Nueva Segovia, abandonaron el país este año, huyendo de la represión y en busca de mejores condiciones de vida. El destino es Estados Unidos, España y  Costa Rica. Gran parte de ellos formaban parte de las estructuras de estos partidos, como Marín o la abogada Claudia Marieta Medina, quien en el pasado fue candidata a alcaldesa en Somoto por el PLC.  

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“Estos partidos perdieron mucha gente de sus bases, principalmente las familias del campo que siempre han sido liberales. Tampoco están organizados en los municipios ni en las cabeceras departamentales, han caído en el desprestigio por servirle  a la dictadura”, explica Abner Martínez Rodríguez, un exdirigente de la  Alianza Liberal de Nicaragua, ALN,  en Nueva Segovia, y que ahora se encuentra en el exilio.

“Ya nadie cree en ellos, porque le hacen el juego a la dictadura. La gente está hastiada de este circo electoral, saben que no participan para ganar, les regalan las alcaldías al Frente Sandinista”, recrimina Martínez Rodríguez. 

El asalto de identidades 

Estos mismos partidos ratificaron a sus candidatos a alcaldes, vicealcaldes y concejales propietarios y suplentes a personas ya fallecidas, nicaragüenses que residen hace muchos años en los Estados Unidos, España y Costa Rica, y compatriotas que fueron forzados a exiliarse, después de la rebelión cívica de  abril de 2018. Eso generó una ola de reclamos y denuncias de los afectados.

Como el caso de la opositora somoteña Danelia Arguello Cano, quien denunció el abuso públicamente de la gente del Partido Liberal Independiente, PLI, quien la incluyó como candidata para la alcaldía del municipio de Somoto. Nunca le consultaron. 

“Yo logré denunciar el caso y me sacaron a mí, a mi sobrino y a un primo de esa lista (de candidatos)”, manifestó Arguello Cano, tras ser consultada al respecto. Afirmó que mucha gente sigue indignada porque no tuvieron la misma suerte de ellos de salir del listado y ahora son candidatos forzados a alcaldes, vicealcaldes y concejales propietarios y suplentes en casi todos los municipios de Madriz y Nueva Segovia. 

Hay otros casos, como el de 11 ciudadanos del municipio de Totogalpa, en Madriz, que residen desde hace varios años fuera del país y aparecen en la lista de candidatos. Por ejemplo, el caso del señor Armando Ardón Vílchez, quien aparece en la lista del Partido Liberal Independiente,  pero se encuentra viviendo en los Estados Unidos. Otro caso es el de la señora Santos Catalina Calderón Velázquez, quien iba de candidata a alcaldesa por el ALN en el municipio indígena de San José de Cusmapa, en Madriz, y reside en Costa Rica. 

Además de María Magdalena López Bautista, quien aparece como candidata a alcaldesa en el listado oficial del PLI en el municipio de Dipilto, en Nueva Segovia, pero lleva varios años de fallecida, según denunció su hija Ogetsy Magdalena López, a quien también la alistaron de candidata a alcaldesa por ese mismo municipio, pero por el partido Alianza por la República, APRE.

Sin estructuras

Tanto el PLI como el APRE, no se les conoce ninguna estructura política en estas zonas del país. Y tienen como candidatos a alcaldes a varios conocidos militantes sandinistas, como es el caso de Flora Matea Ortiz Torres, quien actualmente es diputada suplente del Frente Sandinista. Cuentan también con dos militantes orteguistas como funcionarios del partido “de oposición” ante el Consejo Electoral Departamental (CED) en Madriz, como es el caso de Efraín López Guillén (conocido como Payin). 

Mientras los candidatos a alcaldes por el FSLN ya andan en campaña, usando los recursos del estado e incluso de las mismas alcaldías, al inaugurar proyectos y mencionar los supuestos logros en obras y proyectos de los alcaldes que repetirán otro periodo de cuatro años más en estos 21 municipios de Madriz y Nueva Segovia, estos partidos ni siquiera han podido organizarse.