Los habitantes de esta ciudad de León tienen como tradición comer de vez en cuando una ración de chancho con yuca, adobado, frito, chicharrones, o bien moronga, un plato de la gastronomía local, que representa una delicia de los pobladores de esta metrópolis.

Los leoneses que están fuera de la ciudad y al regresar o visitar su terruño, dentro de todas sus actividades que hacen inicialmente, es llegar a sentarse a las bancas o mesas de los sitios donde se comercializa el chanco, el frito, o adobado, con vinagre y sin faltar el chile o ensalada, que le da el toque final a este sabroso plato del arte culinario de esta ciudad universitaria.

 Pero a esto se suma el consumo de la riquísima chicha de Maíz, como complemento. Doña Lucia Cárcamo, es uno de esos grandes personajes de León, dedicada a la elaboración de esta sabrosísima comida, y sus clientes han calificado el producto, “como el mejor chanchito de León”.

Nos cuenta doña Lucia, que su mamá inició el negocio de vender “chanchito con Yuca”, hace cuarenta y cinco años, precisamente en la esquina donde fue el Restaurante “Bar-baro” y con el pasar del tiempo prosiguió ella, con el negocio y la tradición de elaborar el chanchito más rico de León. Doña Lucia nos comentó que ella desde hace 26 años vende el famoso “Chancho con yuca”, primeramente 20 años en la acera donde fue bárbaro y actualmente desde hace 6 años está ubicada en el Parque “Los poetas”, su negocio tiene el nombre “Chanchito Doña Lucia”.

Cárcamo es madre de 5 hijos, los que sacó adelante profesionalmente, con el trabajo esforzado y venta del tradicional “chancho con yuca”, dijo que pasó muchos obstáculos en la vida y que se levanta desde las 3 de la madrugada para preparar la venta y estar a las ocho de la mañana en su puesto de trabajo. Doña Lucia se caracteriza por ser una mujer altruista, esforzada, sacrificada, pero con una identidad leonesa cien por ciento, es una mujer trabajadora, digna representante de las mujeres luchadoras del país. Cuando usted venga a León, no olvide visitar a doña Lucía en el Parque de los Poetas, León, Nicaragua.

Pedro Altamirano