Tras la irrupción violenta de las fuerzas armadas del gobierno de Ecuador a la embajada de México en Quito, para sacar a la fuerza al prófugo de la justicia ecuatoriana, el exvicepresidente Jorge Glas, acusado de corrupción, se desencadenó una serie de reacciones de diferentes países de derecha e izquierda, comenzando con el gobernante azteca Andrés Manuel López Obrador (AMLO) al romper relaciones diplomáticas con esta nación suramericana.
Esta irrupción a la sede diplomática ha sido duramente criticada, por ser una acción sin precedente en la diplomacia internacional, en tanto el Presidente de Ecuador, Daniel Noboa, alegó defensa de la soberanía nacional y evitar injerencia extranjera en los asuntos internos de su país.
Dictadura de Nicaragua tambien se tomó una embajada
Dicho esto, la dictadura de Nicaragua, rompió relaciones diplomáticas con Ecuador, por considerar dicha acción como “una barbarie política y una flagrante violación del Derecho Internacional”, pero irónicamente el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo, se tomó de forma violenta también la embajada de la OEA en Managua, en abril de 2022. Incluso confiscaron la propiedad y los inmuebles de la sede diplomática cuando la policía orteguista entró fuertemente armados y Ortega expulsó de Nicaragua a los diplomáticos.
En tanto la Presidenta de Honduras, Xiomara Castro, aliada política de los gobiernos de izquierda, y actual presidenta pro témpore de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), convocó este fin de semana a la Troika del este organismo regional para abordar el tema sobre la irrupción a la embajada de México.
Sin embargo, Castro no menciona la toma violenta de la sede diplomática de la OEA en Nicaragua realizada por la dictadura sandinista, mucho menos las violaciones de derechos humanos que imperan en su vecino país.
Tambien con mucho asombro e estupor, otros países se pronunciaron en contra la toma de la embajada mexicana en Quito, entre estos están: Argentina, Bolivia, Colombia, Panamá, Costa Rica, República Dominicana, Perú, Guatemala, Honduras, Cuba, Chile, Venezuela, Brasil y Nicaragua.
La mayoría de estos países han intervenido en más de una ocasión en asuntos internos de otros países, como el caso de Nicaragua, que mantiene protegido en la embajada de Nicaragua en Panamá al prófugo de la justicia, el expresidente Ricardo Martinelli o a los exmandatarios salvadoreños, Mauricio Funes y Salvador Sánchez Cerén o México que cuestionado elección presidencial de Noboa en Ecuador.
¿Quién es Jorge Glas?
Este político ecuatoriano, quien es el epicentro de esta crisis política, fue uno de los más cercanos colaboradores del expresidednte de Ecuador, el izquierdista Rafael Correa. Fue ministro de entidades estratégicas como Energía, Telecomunicaciones y Ambiente, y vicepresidente de este país entre 2013 y 2018, aunque fue cesado de sus funciones antes que terminara su mandato, por el entonces presidente Lenin Moreno.
En 2017 fue condenado por asociación ilícita y actos de corrupción vinculada a la empresa Odebrecht. Estuvo preso durante cinco años y salió de la cárcel por una medida cautelar en 2022, pero recientemente las autoridades judiciales de Ecuador lo habían citado para comparecer en casos relacionados con fondos públicos recaudados para ayudar a la reconstrucción del país desde el terremoto de 2016, por lo que consideró que era una persecución política.
En diciembre del año pasado, Glas, no compareció ante la justicia y se refugió en la embajada mexicana, expresando “temor por su seguridad y libertad personal”.
