CIDH: «No hay condiciones para unas elecciones regionales transparentes en Nicaragua»

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) afirmó que no hay condiciones para realizar unas elecciones regionales libres, justas y competitivas en Nicaragua.

A través de un comunicado de prensa, el organismo señaló que es preocupante que la dictadura de Daniel Ortega celebre unos procesos electorales «en un contexto de cierre del espacio cívico, represión estatal, asedio policial y la militarización en los territorios indígenas y afrodescendientes de la Costa Caribe».

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«En los últimos meses, a través del Mecanismo Especial de Seguimiento para Nicaragua (MESENI), la CIDH recibido información sobre la agudización de una estrategia represiva desplegada en la Costa Atlántica con el fin de transmitir un mensaje de control y temor en contra de los movimientos indígenas y afrodescendientes críticos al gobierno», resaltó.

Para la CIDH, la intención de régimen de Ortega, de cara a las elecciones regionales convocada para el próximo tres de marzo, es con la intención de limitar su participación de los ciudadanos y para renovar los cargos de 90 autoridades de las regiones autónomas.

Aniquilación de competencia en las elecciones regionales

Por otra parte, la Comisión señaló que la envestida del régimen Ortega-Murillo en contra de los partidos de oposición de la Costa Caribe se ve reflejada principalmente por la ilegalización del partido indígena Yapti Tasba Masraka Nanih Asla Takanka (Yatama) y la toma de sus instalaciones regionales.

Sumado a esto, el organismo recordó el secuestro del exdiputado de la Asamblea Nacional y presidente de Yatama, Brooklyn Rivera, «de quien hasta el momento se desconoce su paradero, así como de la representante legal y la diputada suplente del partido, Nancy Elizabeth Henríquez».

Además recordó que ambos líderes indígenas fueron beneficiarios con medidas provisionales por parte de la Corte Interamericana de Derechos Humanos.

A la vez lamentó «los permanentes actos de persecución contra líderes y lideresas indígenas para criminalizarles y retirarles del espacio político; además de los ataques sistemáticos de colonos armados que actúan con la tolerancia de las autoridades del Estado para despojar y desplazar a las comunidades de sus territorios».

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En este contexto, la CIDH afirmó que las acciones de la dictadura de Ortega contra la comunidad indígena atenta gravemente contra la autonomía de los afrodescendientes de la Costa Atlántica «y coloca en riesgo su supervivencia cultural y étnica, y busca afianzar el régimen de concentración del poder en el Ejecutivo en esa zona del país, a partir de la cooptación de sus instituciones y la comprobada ausencia de un sistema electoral independiente».

Exhortan a Ortega a garantizar procesos con condiciones

Finalmente, la CIDH instó al Estado de Nicaragua a adoptar todas las medidas necesarias de conformidad con sus obligaciones internacionales, para garantizar que las comunidades indígenas y afrodescendientes puedan participar, en condiciones de igualdad en las elecciones regionales.

También llamó a Ortega a involucrar a los comunitarios en la toma de decisiones sobre asuntos que inciden o pueden incidir en sus derechos y en el desarrollo de dichas comunidades, de acuerdo a sus valores, usos, costumbres y formas de organización.

«La CIDH insta al Estado de Nicaragua a cesar la represión contra las comunidades indígenas y afrodescendientes, contra las personas integrantes del partido indígena YATAMA y a respetar y garantizar las libertades fundamentales. Además, urge a Nicaragua a informar de inmediato sobre el paradero del señor Brooklyn Rivera en cumplimiento a las medidas provisionales otorgadas por la Corte IDH», demandó.