Wilmer Antonio González Méndez se declaró culpable de haber asesinado a Luz Maritza González y Dayiris Boniche, madre e hija, el pasado 21 de julio de 2021. El acusado también se declaró culpable del delito de violación en contra de Dayiris Boniche, y de portación ilegal de armas.

El Ministerio Público solicitó cadena perpetua por el asesinato de las dos mujeres, además de 25 años de prisión por el delito de violación agravada y un año por tenencia ilegal de armas.

González Méndez aceptó haber cometido el brutal asesinato de madre e hija en la comunidad Kuriwansito, en Mulukukú, Caribe Norte del país. Fue detenido la madrugada del jueves 6 de octubre de este año en Rosita.

El crimen en contra de las mujeres ocurrió en la finca San Jerónimo, que era propiedad de las víctimas, y donde el sospechoso trabajaba como capataz. González era persona de confianza de las mujeres.

Después de cometer los crímenes, González Méndez había estado huyendo y la última vez que había sido visto fue el día 22 de julio del  2021 en Siuna, cuando un taxi lo dejó en la terminal de buses de esa ciudad.

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La tarde del pasado jueves, la Policía del Triángulo Minero confirmó que el sujeto estaba escondido en la casa de su cuñado Ernesto Carrasco Chavarría, de 26 años, quien también fue detenido.

En una audiencia de anticipo de pruebas en Siuna, el año pasado, varios testigos declararon que Maritza González salió temprano el 21 de julio de 2021 con González, pero fue encontrada hasta las 11:50 de la noche con disparos en el cuerpo, a varios metros de la casa hacienda.

Dayiris Boniche fue encontrada casi una hora después, a las 12:40 de la madrugada del 22 de julio de 2021 en la casa hacienda, la cual estaba cerrada y con las luces apagadas. El cadáver de la joven estaba cubierto con una sábana. Se presume que el sujeto la mató a golpes.

Ambas mujeres, madre e hija, habían regresado a Nicaragua hace cuatro años antes, ya que ellas residían en Costa Rica, en Playa del Coco, pero Luz Marina recibió en herencia la finca San Jerónimo, por lo que ambas decidieron hacerse cargo de la propiedad.