Por: Leo Cárcamo Herrera
La licenciada Aleyda González, asesora legal de la Asociación “Mary Barreda”, dijo que la actuación de las tres mujeres que ahora están siendo procesadas judicialmente por el delito de Homicidio en grado de tentativa, por propinar catorce estocadas a una joven de 18 años, (caso de Julissa Carvajal Montano), debe ser motivo de reflexión para muchas féminas, “porque esa circunstancia refleja un alto nivel de machismo de las implicadas que las llevó a situaciones extremas”, expresó.
“Las mujeres debemos de entender que ninguna persona es propiedad de la otra”, “un hombre no puede decir esta mujer es mía”, “ni las mujeres pueden creer que ese hombre su propiedad, esa mentalidad machista, tenemos que eliminarla, porque si mantenemos estos esquemas, vamos a enfrentar situaciones complejas y muy extremas”, refirió González.
Indicó la abogada de Mary Barreda, Aleyda González, que lo peor del caso es que esas tres mujeres que golpearon y acuchillaron a Julissa Carvajal Montano, son víctimas de ese supuesto hombre, por lo cual se menciona fue la razón de la agresión hacia la víctima, “porque ese sujeto no las respeta, es infiel, y tampoco las quiere”, expresó González. Destacó la licenciada González que el caso de las imputadas en un caso Homicidio en grado de tentativa, es motivo de reflexión para las mujeres de Nicaragua, “en el sentido que debemos de buscar información en los Centros de atención a las mujeres, en las organizaciones de mujeres, en los institutos de educación para féminas y participar en las capacitaciones sobre machismo y violencia de género, para comprender mejor las cosas y poder interpretar y orientar nuestros actos y evitar de esa manera actuaciones violentas que nos traen serios problemas e incluso donde podemos encontrar la muerte, la cárcel o ser enviadas a hospitales con lesiones graves”, enfatizó la licenciada González.
Según González que otro aspecto a valorar en el video donde se observa que mucha gente miró la agresión que las tres mujeres le daban a Julissa y se quedaron como espectadores, sin hacer ninguna acción, para poder evitar mucha más tragedia, “al menos llamar a la policía del sector, echar algo, al menos agua a las furibundas mujeres, para que no continuaran agrediendo a su víctima”, “esto que pasó en ese lugar, solo se puede calificar, como un acto deshumanizante”, expresó.