El lema: “¡A la libertad por la universidad!” de la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (UNAN- Managua) que por tantos años fue un signo de lucha universitaria y que logró muchas conquistas en el plano de la educación superior, y que se lo tomó como propio el Frente Sandinista mientras era oposición, ahora fue descartado de plano por la dictadura orteguista.

A través de una circular extendida a los diferentes directores de áreas de esta Alma Mater, la secretaria general de la UNAN –Managua Ángela Rosa Munguía Beteta, informó que en una sesión ordinaria del pasado 15 de abril, “el consejo de dirección, ha aprobado el siguiente lema: “Universidad del pueblo y para el pueblo”, por lo tanto, a partir de la presente debe de aparecer en todos los documentos oficiales.

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El lema de la UNAN-Managua fue parte de la lucha universitaria

“El lema anterior nos identificó en la lucha”

En la misma comunicación la funcionaria orteguista explica que el lema anterior que se adoptó en su momento, “y que nos identificó en la lucha por reivindicar nuestros derechos, pero en la actualidad gozamos de un contexto diferente, gracias a nuestro buen gobierno de reconciliación y unidad nacional, todos los nicaragüenses gozamos de paz, tranquilidad, de nuestro derecho a la salud, educación gratuita y de calidad”, agregó la personera del orteguismo.

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Circular de las autoridades de la UNAN- Managua

Y es que en noviembre del año pasado la dictadura familiar Ortega-Murillo le dio el último zarpazo al único bastión que quedaba sobre el libre pensamiento y de educación independiente como lo fue la confiscada Universidad Centroamericana (UCA), hoy Casimiro Sotelo, porque en esa fecha ordenó a sus diputados en la Asamblea Nacional, modificar la Ley de Reformas y Adicción a la Ley N°. 89, Ley de Autonomía de las Instituciones de Educación Superior.

De igual manera hicieron reestructurar la Ley N°. 582, Ley General de Educación, estas dos reformas para muchos especialistas en el tema, significa la estocada final a la autonomía universitaria, la “aniquilación total” de la libertad educativa en Nicaragua.

En otras palabras se explica que antes, el Consejo Nacional de Universidades era un órgano colectivo conformado por un claustro de rectores de las diferentes universidades públicas de Nicaragua, ahora, pero actualmente se trasladó al poder ejecutivo, es decir, que deja de ser un órgano autónomo para convertirse en un apéndice de la dictadura orteguista, obedeciendo todas las órdenes que se emanan de El Carmen.