Por: Leo Cárcamo Herrera.

Rosalpina Vásquez es sin duda alguna, uno de los personajes más icónicos de esta ciudad de León. Es en esencia, la mujer artista, folclorista, y compiladora de la historia de las tradiciones del Pueblo Indígena de Sutiaba. y hace pocos celebró sus cincuenta años de vida artística y en su gala, por sus atuendos y aspecto, reflejan las transformaciones de su vida.

Rosalpina Vásquez, además, de ser artista, es la única folclorista del Occidente de Nicaragua, declarada por la UNESCO, es madre de cinco hijos, todos profesionales en distintas especialidades, pero sobre todo amantes de la cultura.

“En esta vida he hecho mucho, soy maestra, licenciada en Ciencias Sociales y la otra parte es la cultura; me siento realizada como muchas madres solteras del país que hemos hecho frente a la educación de nuestros hijos”, narró con la sonrisa   y amabilidad que le caracteriza.

Dentro de los aportes que ha hecho Rosalpina a la educación y a la historia de la  danza  del Pueblo Indígena de Sutiaba, se destacan: Fundadora del primer preescolar de León, y el haber escrito un libro titulado “Sutiaba y sus Danzas Tradicionales.

Nos cuenta Rosalpina que su gran amor por las danzas la llevó en el año 1969 a participar con un baile con un traje sencillo, en la primera Feria de Santa Lucía, un evento propio de la Comunidad Indígena de Sutiaba.

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Y ahora desde 1999 es la directora del Ballet Folklórico Rosalpina Vázquez, y muestra ser autora del libro “Sutiaba sus Danzas Tradicionales”, con el apoyo de la Cooperación Española, escritos donde recoge la historia de personajes autóctonos de la zona y ocho danzas que ha puesto en escena.

Expresó Rosalpina que el haber escrito su libro “Sutiaba sus Danzas y Tradicionales”, significó para ella, la concreción de uno de sus sueños, después de 15 años de investigación. En el mismo libro incorpora escritos de su padre a mano, de coplas de los mantudos y colección de danzas de Sutiaba “para que nicaragüenses nos demos cuenta de que somos ricos en arte y danzas”, refirió.

Rosalpina y su ballet ha viajado por todo el país y ha hecho conocer a su natal León a través de la danza. Su trabajo absoluto es un ejemplo. Predecesora de bailes, se ha ganado el cariño de los leoneses,  no solo como la artista, la danzarina de ballet, sino como la dama, madre, amiga y ciudadana que ha sido durante sus años de existencia.

Rosalpina Vásquez es hija de Victorino Vásquez, artista nato del Teatro Popular en León, aunque despareció físicamente, pero dejó impregnado el amor al arte a sus hijos.

Cabe mencionar que el año 2010 se le otorgó la Orden Independencia “Rubén Darío”., aunque ella mantiene que los artistas no viven de los reconocimientos, si no de las oportunidades y promoción artística de parte de los gobiernos tanto nacionales como locales, asimismo de las instituciones correspondiente.

Finalmente es transcendental destacar el papel multifacético de mujer, madre, docente y folclorista, que ha mantenido Rosalpina Vásquez, sobre todo cuando la cultura en nuestro País todavía es muy débil en materia económica.