El Gobierno de Estados Unidos mantuvo a Cuba, Venezuela y Nicaragua en su “lista negra” de tráfico de personas al considerar que incumplen los estándares marcados por la ley estadounidense contra este fenómeno, que establece métodos para evitarlo y proteger a las víctimas.

Así lo señala el Departamento de Estado en su Informe de Tráfico de Personas de 2022, donde revisa la situación a nivel mundial.

Junto a Cuba, Venezuela y Nicaragua, hay otros diecinueve países en la “lista negra”, como China, Corea del Norte, Siria, Irán, Rusia y Bielorrusia.

Los traficantes de personas emplean “la corrupción” para que los gobiernos hagan la vista gorda, afirmó Estados Unidos.

Respecto a Nicaragua, el informe dice que el régimen nicaragüense de Daniel Ortega, ha “minimizado” la gravedad de este fenómeno.

En concreto, el reporte indica que Managua no ha informado de ninguna investigación, enjuiciamiento o condena de empleados gubernamentales cómplices en “ofensas de tráfico” de seres humanos, pese “a la corrupción endémica y la amplia complicidad de funcionarios”, ni ha cooperado con las ONG que protegen a las víctimas.

EE.UU. apunta que “observadores” han cuestionado la validad de que el Ejecutivo nicaragüense documente el tráfico de personas, citando como ejemplo los datos de las fuerzas de seguridad, ya que algunos de esos “observadores” han apuntado que el Gobierno “oscureció o clasificó erróneamente y de forma intencionada los casos de trata para minimizar las estadísticas”.

Con información de DW.