Los precios del petróleo y derivados, más el efecto de inflación desde 2021, ponen en aprietos la economía de los países centroamericanos que podrían cerrar este año con alta inflación y con un crecimiento económico menor que el esperado en la recuperación post-pandemia.
El alto costo de vida en Centroamérica sigue en alza con una inflación que podría cerrar este 2022 hasta un 8.7 %, al combinar el efecto acumulado del fenómeno global que comenzó a mediados del año pasado y la crisis desatada por la invasión de Rusia contra Ucrania que ha disparado los precios de hidrocarburos y otros bienes.
Un informe presentado en días recientes por el Consejo Monetario Centroamericano (CMCA) proyecta que además de la inflación, la recuperación económica a los niveles esperados para este año no podrían cumplirse en concordancia con las proyecciones hechas por el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial.
La inflación en la región toca los picos más altos de las últimas décadas al registrarse hasta febrero un promedio de 5.8 % para los países del istmo y algunos con mayores porcentajes, sostiene el informe.