Rechaza que haya muerto por un accidente de tránsito y pide a las autoridades policiales que investiguen bien el caso hasta dar con los supuestos responsables de lo que ella considera un crimen de odio.
Sofía del Carmen Granado Vanegas, es la madre de Darexon Ariel Morales Granados, quien murió en circunstancias trágicas la madrugada del pasado lunes 28 de febrero, en la entrada a Salinas Grandes, kilómetro 78 del tramo de carretera León – Managua. Sofía, declaró que no se encuentra conforme con las investigaciones preliminares hechas por la Policía Nacional sobre la muerte de su hijo.
“Ese día, el cuerpo de Darexon, fue localizado a las 4:30 de la madrugada en el paso peatonal de la vía panamericana, en una escena dantesca”, dijo, entre solloza la madre.
Recuerda que estaba en casa al momento que recibió la llamada telefónica, en la que le decía que el penúltimo de sus 7 hijos, había sufrido un supuesto accidente de tránsito. “Me dieron las características de su cuerpo y su vestimenta. Andaba unos zapatos blancos deportivos y había salido a las 11:30 de la mañana del domingo a reunirse con unas amigas que viven en El Trapiche, incluso me dijo, ‘mamita regreso en la tarde porque tengo que ir a trabajar’. Mi hijo, no tenía un trabajo estable, pero si lo llamaban de algún lugar nunca decía que no, donde quiera acudía, ese día le advertí que no saliera porque nunca se sabe qué tipo de amistades nos topamos en la vida, pero decía que sus amigas lo cuidaban y lo protegían. Si era así, porque lo dejaron venir tan noche desde allá. No he podido hablar con ninguna de ellas para saber qué pasó”, expresó la adolorida mamá.
Sentada en un pequeño corredor de la casa, en la comarca Santa Elena, a unos 5 kilómetros del lugar de la tragedia, doña Sofía del Carmen, no puede contener las lágrimas al pensar en la tormentosa muerte que tuvo su hijo, “dicen que falleció producto de la embestida en un accidente de tránsito. Es una versión dudosa porque las condiciones del cuerpo de mi hijo me dicen que lo asesinaron. Fue decapitado y lo tiraron como un perro para hacer creer que lo habían atropellado. Tenía golpes, fracturas en sus piernas, brazos, costillas, una herida en el abdomen, señales de arrastramiento en las pantorrillas y rasgada la parte trasera del pantalón”, aseguró entre lágrimas.
Dudas sobre las causas de muerte
Cerca donde ocurrió el suceso, un vecino aseguró haber visto a la víctima entre las 3:00 y 4:00 de la madrugada caminar sobre el costado extremo de carretera y entrar al camino empedrado que conduce a Salina Grande, “aquí es un tramo oscuro y peligroso, observe al muchacho caminar de este a oeste y entró al camino. Lo que no entiendo es cómo apareció el cuerpo al otro lado de la carretera y de esa manera. Estaba afuera y no escuché ningún frenazo o impacto de un vehículo, nunca había visto tal cosa”, reveló la fuente que prefirió omitir su identidad por temor a represalias.
Versión que llena más de duda a doña Sofía, quien se desempeñó por más de 10 años en la Policía Nacional y bajo su hipótesis, busca alguna pista junto con otros familiares en el lugar de los hechos que le ayuden a esclarecer el crimen de su hijo.
“Se conocen bien cuando el cuerpo sufre lesiones por una cortada y cuando es por accidente y aquí todos estamos convencidos que no fue un accidente de tránsito. Todo es confuso, el médico forense nos dijo que lo habían matado, después salieron con otra versión, aduciendo que se trataba de una muerte por accidente de tránsito. Solo Dios sabe lo que pasó, lo que sé es que estoy a punto de enloquecer porque hay muchas versiones al respecto”, insistió.
De acuerdo al análisis hecho por un médico forense consultado por este medio de comunicación, sobre la característica de este hallazgo y la probabilidad que sufriera el desprendimiento de la cabeza durante una embestida por un vehículo, el experto no descarta que haya ocurrido esta posibilidad. Sin embargo, dejó entrever que no es un hecho común que un accidente provoque este tipo de evento, “si hay un vehículo que tenga una saliente o lámina que a gran velocidad puede haber lesionado el cuello, nunca se puede descartar, porque hay que ser categórico con estos casos porque han ocurrido accidentes frontales entre vehículos que dejan imágenes impresionantes, pero con peatones habría que analizar qué tipo de vehículo se vio implicado y las lesiones que se puedan encontrar en el cuerpo para determinar el tipo de corte, desgarro o arrancamiento de la pieza”, explicó el especialista.
Un hijo con mira de futuro
Doña Sofía del Carmen describe a su hijo como un muchacho amigable, trabajador, atento y cariñoso, “siempre decía que le gustaba verme bonita y arreglada, que iba a luchar para que no siguiera trabajando y tuviera una vida estable en mi vejez. Porque sabía cuánto luchaba vendiendo pan en las calles para sobrevivir,” reveló.
Agregó que le gustaba el trabajo, se había desempeñado como mesero en un bar en Nagarote, en un puesto de comida rápidas en Estelí y este año se preparaba para ingresar a la universidad a estudiar enfermería, o a la Academia de Policía Walter Mendoza.
Justicia y castigo para culpable
Hasta el momento se desconoce a qué especialidad de la policía fue asignada la investigación del caso, partiendo que al principio fue atendido por la especialidad de tránsito y la médico forense.
La madre de la víctima argumentó que es de suma importancia que sigan con las investigaciones para esclarecer el hecho y se deslinden responsabilidades. Si se trata o no de una muerte violenta por accidente de tránsito o un asesinato, “me hace pensar que es un crimen de odio, por eso pido que atrapen al asesino de mi hijo y para ello la policía debe realizar las investigaciones claras, buscar en el celular. ¿Quién fue la última persona que llamó a mi hijo minutos antes de su muerte?. En el bar donde llegó a pedir agua, dijo a la dueña que tenía que marcharse porque su mamá lo estaba llamando y eso es mentira. La Policía está en la obligación de hacer pruebas de peritaje, el croquis y una reconstrucción de lo que pudo haber pasado y se haga justicia y castigo para el culpable, de lo contrario le digo que de la justicia de Dios nadie se escapa”, puntualizó la mujer que por 10 años sirvió a la Policía Nacional.
Se conoció que los detectives asignados al caso han ocupado la vestimenta, el teléfono celular de Darexon Ariel y retuvieron a varias personas allegadas a la víctima en calidad de investigadas, pero hasta ahora no hay respuesta.