Trabajadores del Estado obligados a participar en la caminata del miedo
La sombra de abril 2018 persigue a Daniel Ortega y Rosario Murillo, quienes convocaron a una caminata a nivel nacional, renegando por los 7 años de resistencia cívica en Nicaragua.
NACIÓNESCENARIO NACIONAL
Darío Medios 6
4/1/20251 min read


La sombra de abril 2018 persigue a Daniel Ortega y Rosario Murillo, quienes convocaron a una caminata a nivel nacional, renegando por los 7 años de resistencia cívica en Nicaragua.
Hace siete años la dictadura vivió con horror, manifestaciones masivas de nicaragüenses que les demandaban dejar el poder. En respuesta, las marchas fueron repelidas con bala, al menos 350 nicaragüenses murieron por la violenta represión.
Empleados públicos son obligados a marchar hoy y la orden es clara, necesitan caminatas nutridas, actitud beligerante para tomarse la calles, una puesta en escena que convenza a los dictadores que Nicaragua les respalda.
Empleados públicos y militantes marchan marchan hoy sobre la sangre de las víctimas de la dictadura, las víctimas del ejército, en un país donde hay más de 50 presos políticos, donde la democracia expiró.
En las intervenciones de Rosario Murillo no han faltado las ofensas y descalificaciones, todo aquel que no piense como ella es vende patria, traidor y otra interminable lista de epítetos.
El revanchismo sale a caminar, con la intención de infundir terror. Con la participación de grupos paramilitares, la caminata es un recordatorio de cómo esos grupos ejercieron violencia contra un pueblo desarmado Organizaciones de derechos humanos han denunciado que la presencia de estos grupos pro gubernamentales ha generando un ambiente de intimidación y restringe las libertades civiles.
La caminata pretende ser una demostración de fuerza por parte de la dictadura, sin embargo proyecta la enfermiza paranoia de los dictadores.
