En ciudades como Managua, Matagalpa, Estelí, Chinandega y León, el establecimiento de las llamadas tiendas chinas, poco a poco consumen el comercio local. Viviendas antiguas son demolidas y adaptadas para crear nuevos establecimientos, locales renovados para el negocio asiático.
La actividad comercial de ciudadanos chinos en Nicaragua crece imparable, desde el año pasado cuando la dictadura formalizó un propagandístico tratado de libre comercio con el gigante asiático, la llegada de ciudadanos chinos para establecer negocios ha aumentado considerablemente.
Las tiendas chinas literalmente están por cada esquina, con facilidades para la importación de productos en grandes cantidades han ido desplazando poco a poco al comercio local. Algunos dueños de tiendas ahora prefieren rentar sus locales a los chinos para evitar competir con ellos.
“Ahora la gente prefiere ir a la tienda china, aunque las cosas no sean de la mejor calidad, pero son más baratas y uno piensa en la economía”. Comparte a Darío Medios una deña de un pequeño negocio de productos varios en Estelí, quien asegura además ha visto caer sus ventas.
En Chinandega se contabilizan al menos 12 tiendas chinas, en los alrededores del mercado central, en el sector del mercadito y en zonas céntricas de la ciudad. Distribuidora Selecto, un supermercado de gran tamaño, prefirió cerrar sus puertas y ahora en su local se ubica una de las tiendas chinas más grandes.
“Esas ahora están por todas partes, han remodelado casas y hasta se han construido nuevos establecimientos, es un buen negocio para los chinos, pero ahí se friegan los de aquí” Comparte un conductor de taxi, que ha observado el crecimiento del comercio Chino por la llamada ciudad de las naranjas.
En Managua las tiendas chinas alcanzan otros niveles, actualmente la capital tiene tres enormes centros de compras China Mall, Metro China y Max Supermercado, este último ubicado frente a ENABAS en la zona del mercado oriental. Estos grandes establecimientos compiten con el mercado local, pero con grandes ventajas.
Así lo aseguran comerciantes quienes expresan que el trato a los chinos por el gobierno es diferente. “No pagan impuestos por los productos que traen y no es que hagan grandes inversiones, porque las ganancias van de regreso a su país, tampoco pagan los mismo impuestos” Asegura un comerciante del mercado oriental.


Desde un árbol, comerciante de origen asiático observa la remodelación del lugar que será una tienda china, en la ciudad de León.
Bajos salarios y malas condiciones para trabajadores
Los negocios chinos no solo traen una variedad de productos en áreas diversas, desde cosméticos, perfumería, electrodomésticos, ferretería, librería entre otros. También traen la fama de no pagar bien a sus trabajadores, de largas jornadas de trabajo y hasta maltrato.
“Fui porque vi el anuncio de que buscaban personal, me dijeron que pagan 230 córdobas por día, no te ofrecen prestaciones sociales y solo te dan media hora para comer”. Nos cuenta una joven que intentó aplicar a un puesto de trabajo en una tienda china de Estelí. Pero es posible que los salarios varíen según la localidad.
Una joven de León comparte a Darío Medios su experiencia. “Si queres trabajar más de 9 horas, que no te paguen ni prestaciones podes aplicar, dos faltas y vas de viaje, no te vas a tu casa para almorzar y solo te miden el tiempo para ir al baño, por eso siempre están buscando personal nadie aguanta”. Nos dice.
Pero son cientos de jóvenes que buscan estos empleos, ante la falta de capacidad que tiene la dictadura de crear verdaderas fuentes de empleo dignas y de calidad. La mayoría de trabajadores son mujeres menores de 30 años, en algunos casos trabajan para costear gastos de estudios.


