Oposición nicaragüense resalta el legado de paz de Violeta Barrios de Chamorro

“Violeta Barrios de Chamorro tuvo un papel muy relevante en Nicaragua en momentos sumamente críticos, en momentos en que se estaba terminando la guerra”

ESCENARIO NACIONAL

DarioMedios

6/15/20253 min read

Diversos sectores de la oposición nicaragüense han lamentado profundamente el fallecimiento de la expresidenta Violeta Barrios de Chamorro (1990-1997), a quien reconocen como una figura clave en la transición democrática del país y símbolo de reconciliación nacional.

Dora María Téllez, exguerrillera y disidente sandinista, subrayó la importancia histórica de la expresidenta, recordando que en 1990 logró derrotar en las urnas a Daniel Ortega, poniendo fin a su primera etapa en el poder.

“Violeta Barrios de Chamorro tuvo un papel muy relevante en Nicaragua en momentos sumamente críticos, en momentos en que se estaba terminando la guerra”, expresó Téllez.

La victoria de Chamorro significó el fin de una década de conflicto armado entre el Frente Sandinista y la “Contra”, y marcó el primer traspaso pacífico de poder en la historia reciente del país. Para Téllez, su administración fue un “símbolo” de reconciliación nacional, democracia y reconstrucción institucional.

“Lo más relevante para mí es la vocación de unidad, paz, democracia y reconciliación nacional de la cual doña Violeta era una persona emblemática. Ella estaba realmente comprometida con ese pensamiento, con esa práctica democrática y de reconciliación”, afirmó.

Nuevas generaciones recuerdan su ejemplo

Desde el exilio, la joven opositora Alexa Zamora también rindió homenaje a la expresidenta, subrayando el impacto histórico de su legado.

“El legado de Violeta Barrios de Chamorro marcó un hito en la historia de Nicaragua, el cual será imborrable”, dijo. Añadió que su gobierno se caracterizó por una clara “vocación de reconstrucción de un país que venía de una guerra civil y que estuvo marcado por la violencia”.

Zamora reconoció que Chamorro “dio pasos significativos” hacia la restauración de la democracia, el retorno de la paz y la construcción de una visión de país incluyente.

El líder estudiantil Lesther Alemán, exiliado en Estados Unidos tras ser encarcelado por la actual dictadura, también se pronunció en redes sociales:

“Doña Violeta: Gracias a la mujer que le devolvió la esperanza a Nicaragua. Nos abrazó como una madre en tiempos difíciles y apostó por un país con paz, justicia y libertad. Su legado nos guía a seguir construyendo el país que ella soñó. Regresaremos”.

Por su parte, la Alianza Universitaria Nicaragüense (AUN), integrada por jóvenes exiliados, reconoció en un comunicado que Chamorro fue una mujer que “con su valentía sembró las bases de la libertad y República en Nicaragua”.

Desde el exilio, la organización expresó que su ejemplo “es faro que guía a la juventud comprometida con la democracia. Seguimos adelante, con más fuerza y esperanza, para construir el país que ella soñó”.

Un gobierno marcado por los retos

El economista Enrique Sáenz, quien fue crítico del gobierno de Chamorro en los años noventa, también reconoció su valentía y su papel como figura clave en tiempos de crisis nacional.

“A doña Violeta le tocó afrontar situaciones personales, familiares, empresariales y políticas adversas y peligrosas: cárceles, confinamiento y destierro de su esposo Pedro Joaquín Chamorro Cardenal y más tarde su asesinato; enfrentar los acosos y cierres de La Prensa en los ochenta; encabezar una campaña electoral en plena guerra. Y gobernar con una economía destrozada y una sociedad que jamás había vivido en democracia”, rememoró.

Sáenz destacó que fue una dirigente “comprometida con la democracia frente a dictaduras y en el gobierno” y que, a diferencia de muchos, “dejó el poder y se fue para su casa sin pretender aferrarse o preservar cuotas de poder”.

“Ella asumió la política por imperativo moral y no por ambición de poder”, expresó el economista, exiliado en Costa Rica y despojado de su nacionalidad por el régimen Ortega-Murillo.

A su juicio, doña Violeta fue una mujer “honrada” de la cual “nadie puede decir que se llevó un centavo o una propiedad”.

Denuncian muerte en el exilio

Tanto Dora María Téllez como Alexa Zamora lamentaron que doña Violeta haya muerto fuera de Nicaragua, como consecuencia de la persecución del régimen contra sus hijos, a quienes se les despojó de su nacionalidad y se les confiscaron sus bienes.

“Esa es una de las consecuencias de la dictadura”, denunció Téllez. “A ella la tienen que sacar de Nicaragua porque ningún hijo podía cuidarla. Esas son las realidades que cada familia nicaragüense enfrenta”.

Téllez aprovechó para expresar su afecto y apoyo a la familia Chamorro Barrios: “Yo le tuve mucho cariño y mucha admiración. Extiendo mi solidaridad a toda la familia por el fallecimiento de su mamá, la cabeza de familia”, afirmó.

Para Zamora, “la muerte de una figura histórica como doña Violeta Barrios de Chamorro que marcó un hito en el camino de Nicaragua hacia la paz, la justicia y la democracia no es más que una muestra del estado actual de la situación del país que se encuentra sumido bajo el mando férreo, el control férreo de la pareja dictatorial” de Daniel Ortega y Rosario Murillo.