La recopilación de cada uno de los atropellos a los derechos humanos cometidos por la dictadura de Ortega y Murillo, es una labor muy importante para evidenciar, hacer memoria histórica y buscar justicia. Pero esta no es una tarea fácil sobre todo cuando se trata de una dictadura como la que se vive en Nicaragua.

Desde el inicio de las protestas en abril del 2018, las organizaciones de derechos humanos que trabajaban en ese entonces en el país, poco a poco recopilaban información de los sucesos que atentaban contra la integridad humana y el desmantelamiento de la democracia y estado de derecho, pero esta tarea cobro también un precio para los defensores de derechos.

La represión alcanzo a las organizaciones de derechos humanos, quienes fueron expulsados, canceladas sus personerías jurídicas y obligadas al exilio. En Nicaragua defender derechos se ha convertido en un crimen y solo la dictadura se atribuye contradictoriamente a sus acciones, como los defensores del pueblo.

El Centro Nicaragüense de Derechos Humanos, CENIDH y la Comisión Permanente de los Derechos Humanos (CPDH) forman parte de las organizaciones defensoras de derechos que fueron canceladas y su personal obligado al exilio.

En Nicaragua, la dictadura ha cancelado la personería jurídica a más de 5,600 organizaciones no gubernamentales (ONG) desde las protestas de 2018. Estas cancelaciones se han realizado bajo el pretexto de incumplimiento de la normativa legal y financiera, o por acusaciones de apoyo a las protestas.

Defender derechos desde el exilio

La defensa de derechos humanos, es una labor que se hace con pasión y perseverancia. Así lo ha demostrado el colectivo de derechos humanos Nicaragua Nunca Más, organización que nació en el exilio hace seis años y que ratifica su compromiso con las víctimas de violencia en Nicaragua.,

«En estos seis años de fundación del Colectivo hemos logrado acompañar a 1,764 víctimas directas, de las cuales hemos documentado 1,343 casos, historias de personas que han vivido violaciones a sus derechos humanos en Nicaragua, como es tortura, desaparición forzada, prisión arbitraria, ejecuciones extrajudiciales», expresó Yader Valdivia, Coordinador de documentación de esta organización,

El colectivo es una de las organizaciones más activas ofreciendo acompañamiento a las víctimas, cifras, sistematización de denuncias y siendo un referente clave para el registro de la memoria histórica. «Necesitamos encontrar la verdad para alcanzar la justicia y por eso trabajamos en la memoria histórica”. Explica Linda Núñez, Coordinadora de Educación y Memoria.

Espacios internacionales una ventana en la defensa de derechos

«Hemos elaborado medidas cautelares, medidas provisionales, pero principalmente hemos logrado trasladar las voces de las víctimas, voces que han sido silenciadas producto de la represión para que puedan ser escuchadas». Compartió Salvador Marceno, Coordinador de Incidencia y Comunicación.

Para Marenco es de mucha importancia buscar respuesta ante la justicia internacional debido a que es imposible en este momento conseguirla en Nicaragua, siendo clave para ello el trabajo de incidencia del Colectivo ante espacios como la ONU, la CIDH y otros foros mundiales.

Las declaraciones de los funcionarios del colectivo de derechos Humanos Nicaragua Nunca Más, se dieron durante un acto de conmemoración de los 6 años de la organización. Donde participaron embajadores, representantes de organismos internacionales, activistas de derechos humanos y periodistas.