Un encuentro con directivos del Sistema Nacional Educativo, fue la última actividad pública de Ramona Rodríguez, como presidenta del Consejo Nacional de Universidades CNU. Junto a ella también se va Jaime López Lowery, director ejecutivo del CNU y otros tres directivos.

Tras la salida de Ramona Rodríguez, quien además era la rectora de la UNAN-Managua desde 2015, la rectoría quedó a cargo de la secretaría general, Ángela Rosa Munguía Beteta, la tercera al mando en el Consejo de Dirección de esta universidad.

Fuentes aseguran que “Ramona ya comenzó a escribirle a los organismos regionales de la educación superior como el Consejo Superior Universitario Centroamericano y la Unión de Universidades de América Latina y el Caribe, informando que ya no está dentro de la educación superior de Nicaragua.

Ramona Rodríguez, sirvió bien a la dictadura, influyendo en la confiscación de universidades privadas y “al participar en una campaña coordinada para tomar represalias contra los críticos del régimen Ortega-Murillo”. Siendo sancionada por Departamento de Estados de EE. UU., el 21 de diciembre de 2023.

La destituida funcionara deja un terrible legado de represión y una larga lista de acciones que permitieron la destrucción en la educación superior de Nicaragua. Es la principal responsable de la cacería y “muerte académica” de más de un centenar de estudiantes expulsados de las Universidades, muchos de ellos a escasos meses de terminar sus carreras.

Más destituciones en CNU

La dictadura continua demostrando que todos sus funcionarios son desechables, esta vez toco el turno al CNU y a las Universidades. Sin procedimientos claros o justificaciones, el régimen mueve a su antojo a sus funcionarios, quienes después de ser “renunciados” solo les queda guardar silencio.

Otro de los destituidos es Luis Lobato Blando, vicerrector de la UNAN-Managua. “Él dice que es porque va a jubilarse, pero en realidad es porque no lo tomaron en cuenta para reemplazar a Ramona Rodríguez”, señaló una fuente ligada a la educación superior de Nicaragua.

Roberto Blandino, director de la Universidad Abierta en Línea del CNU, también fue destituido. Al igual que Jilma Romero Arechavala, directora general de gestión del conocimiento del CNU. La dictadura todavía no ha anunciado a las personas que asumirán las vacantes.

Desde finales de 2023, el régimen ha destituido en silencio a rectores, vicerrectores y secretarios generales de siete de las universidades estatales de Nicaragua. Varios de ellos sancionados por su participación en la represión en las universidades luego de las protestas de abril del 2018.