Falsificador de manuscritos darianos vive protegido por el régimen Ortega–Murillo

Raúl Gerardo Bermúdez Balladares, señalado por falsificar y vender casi mil documentos atribuidos a Rubén Darío a universidades de Estados Unidos, reside en Managua sin enfrentar procesos judiciales y bajo la protección de figuras vinculadas al régimen sandinista.

ESCENARIO NACIONALNACIÓN

DaríoMedios Internacional

12/11/20252 min read

Un falsificador de manuscritos del poeta Rubén Darío vive con total normalidad en Nicaragua, protegido por el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo, pese a estar implicado en uno de los mayores escándalos literarios internacionales recientes. Se trata de Raúl Gerardo Bermúdez Balladares, acusado de falsificar y vender casi mil documentos atribuidos al “Príncipe de las Letras Castellanas”.

Según una investigación publicada por el diario ABC de España, Bermúdez Balladares encabezó una red que, en 2012, vendió a la Arizona State University un lote de 900 manuscritos falsificados supuestamente escritos por Rubén Darío, operación valorada en más de 200 000 dólares. Entre los materiales se incluían poemas inéditos, cartas diplomáticas, correspondencia privada y traducciones atribuidas falsamente al poeta nicaragüense.

La magnitud del fraude generó preocupación en el ámbito académico. Tanto Arizona State University como Harvard University reconocieron posteriormente que la autenticidad de los documentos estaba en duda y que la investigación seguía abierta.

Impunidad bajo protección política

A pesar del escándalo internacional, no existe hasta la fecha un solo proceso judicial contra Bermúdez Balladares en Nicaragua. Por el contrario, continúa residiendo en Managua bajo el amparo de figuras influyentes vinculadas al régimen Ortega–Murillo, lo que le ha permitido mantenerse lejos de cualquier responsabilidad penal o académica.

Fuentes consultadas señalan que Bermúdez mantiene conexiones con personas de alto perfil capaces de garantizarle cierta impunidad y protección, incluso cuando su fraude afecta directamente el legado literario más importante de Nicaragua: la obra de Rubén Darío.

Una vida de lujos y fiestas en plena impunidad

El 7 de diciembre de 2025, Bermúdez reapareció públicamente al organizar una fiesta de lujo en Managua, rodeado de invitados ligados a estructuras de poder. Entre ellos destacó la presencia de Martha Julieta Gutiérrez Granera, hija de la exjefa de la Policía, Aminta Granera. También asistió Enrique Sacasa Flores, primo de Granera y tío de la desterrada María Fernanda Alemán.

Las fotografías del evento muestran un ambiente festivo que contrasta con la gravedad del fraude literario cometido y la ausencia total de consecuencias legales.

Para muchos, la celebración representa un símbolo de impunidad y connivencia: un mensaje claro de que quienes gozan de protección oficial pueden violar la ley, lucrarse del patrimonio cultural e incluso burlar instituciones académicas internacionales sin temor a ser procesados.