Exiliados nicaragüenses en Costa Rica solicitan protección máxima a ACNUR

Una delegación de organizaciones opositoras nicaragüenses en el exilio entregó este jueves una carta a la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados ACNUR, solicitando protección máxima para los refugiados nicaragüenses que se encuentran en territorio costarricense.

ESCENARIO NACIONALNACIÓN

Darío Medios

6/20/20253 min read

Organizaciones opositoras entregaron una carta al Alto Comisionado de ACNUR en San José, en medio de creciente preocupación por la seguridad de refugiados nicaragüenses tras el asesinato del mayor en retiro Roberto Samcam.

Una delegación de organizaciones opositoras nicaragüenses en el exilio entregó este jueves una carta a la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados ACNUR, solicitando protección máxima para los refugiados nicaragüenses que se encuentran en territorio costarricense.

La iniciativa fue encabezada por la Yapti Tara Mama Grande de INANA Nicaragua, en representación de la Gran Confederación Opositora de Nicaragua (GCO Nicaragua). El documento fue entregado directamente a representantes del ACNUR en su sede en San José, y está respaldado por una amplia coalición de movimientos y organizaciones políticas y sociales nicaragüenses en el exilio.

Entre las organizaciones que respaldan la solicitud se encuentra el Movimiento Campesino de Nicaragua Avanza, la Coordinadora Universitaria por la Democracia y la Justicia, el Movimiento Autónomo 18 de Abril, la Unión de Presas y Presos Políticos Nicaragüenses, PAC Nicaragua, Conexión Nica-USA, la Fuerza Democrática Nicaragüense en el Exilio (FDN), entre otros.

Reacción ante clima de inseguridad

La solicitud ocurre en un contexto marcado por una creciente alarma entre los exiliados nicaragüenses, tras el asesinato del mayor en retiro Roberto Samcam, ocurrido el 19 de junio en Moravia, San José. Samcam, quien vivía en el exilio y era un reconocido analista político y crítico del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo, fue ultimado a balazos en un hecho que muchos sectores califican como un acto de persecución política transnacional.

“El crimen de Samcam ha puesto en evidencia que no estamos seguros, ni siquiera en el exilio. El régimen sigue extendiendo su brazo represivo más allá de las fronteras”, declaró uno de los firmantes del documento, quien por razones de seguridad prefirió mantener el anonimato.

La carta entregada a ACNUR exige el reforzamiento inmediato de los mecanismos de protección para los solicitantes de refugio y los refugiados reconocidos, así como el establecimiento de protocolos especiales para líderes políticos, activistas y defensores de derechos humanos.

También se solicita a ACNUR y al gobierno costarricense que investiguen las amenazas sistemáticas, el hostigamiento digital, la vigilancia y otros tipos de intimidación que sufren activistas nicaragüenses en el exilio.

“Costa Rica ha sido un refugio, pero la situación está cambiando. Necesitamos que se garantice nuestra integridad física y psicológica. No vinimos a este país a delinquir, sino a salvar nuestras vidas”, expresó otro miembro del Movimiento Autónomo 18 de Abril.

Dificultades para obtener refugio y asilo político

Desde 2018, más de 100,000 nicaragüenses han buscado refugio en Costa Rica, huyendo de la represión del régimen Ortega-Murillo. La respuesta internacional ha sido tibia ante la crisis de refugiados, a pesar de los constantes señalamientos de organismos de derechos humanos.

El reciente asesinato de Samcam generó un pronunciamiento inmediato del gobierno de Estados Unidos. A través de su Oficina para Asuntos del Hemisferio Occidental, expresó estar “conmocionado” y ofreció colaboración a las autoridades costarricenses para esclarecer el crimen.

Por su parte, la oposición nicaragüense ha insistido en que Costa Rica y organismos internacionales deben tomar medidas concretas para proteger a quienes han denunciado públicamente los crímenes del régimen.

Dificultades para obtener refugio y asilo político

Desde 2018, más de 100,000 nicaragüenses han buscado refugio en Costa Rica, huyendo de la represión del régimen Ortega-Murillo. La respuesta internacional ha sido tibia ante la crisis de refugiados, a pesar de los constantes señalamientos de organismos de derechos humanos.

El reciente asesinato de Samcam generó un pronunciamiento inmediato del gobierno de Estados Unidos. A través de su Oficina para Asuntos del Hemisferio Occidental, expresó estar “conmocionado” y ofreció colaboración a las autoridades costarricenses para esclarecer el crimen.

Por su parte, la oposición nicaragüense ha insistido en que Costa Rica y organismos internacionales deben tomar medidas concretas para proteger a quienes han denunciado públicamente los crímenes del régimen.