Director del OIJ denuncia intento de manipulación en investigación por caso Roberto Samcam

El director del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) de Costa Rica, Randall Zúñiga, reveló que una “agencia de inteligencia” intentó incidir en la investigación sobre el asesinato del mayor en retiro nicaragüense Roberto Samcam, ocurrido el pasado 19 de junio en San José. Según explicó, la institución recibió un documento anónimo de 25 páginas con información “muy elaborada”, cuya intención parecía ser darle un “tinte político” al caso.

ESCENARIO NACIONALNACIÓN

Darío Medios

9/26/20253 min read

El director del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) de Costa Rica, Randall Zúñiga, reveló que una “agencia de inteligencia” intentó incidir en la investigación sobre el asesinato del mayor en retiro nicaragüense Roberto Samcam, ocurrido el pasado 19 de junio en San José. Según explicó, la institución recibió un documento anónimo de 25 páginas con información “muy elaborada”, cuya intención parecía ser darle un “tinte político” al caso.

Zúñiga señaló que la documentación, que fue anexada al expediente judicial, incluía nombres, números de teléfono y descripciones físicas de presuntos sicarios, además de identificar a Pablo Robles Murillo como supuesto autor intelectual del crimen. El director del OIJ aclaró que, aunque dicha información fue investigada, no corresponde necesariamente con los hechos que hasta ahora ha logrado comprobar la policía judicial.

“Cuando alguien da información confidencial, suele hacerlo de manera breve y puntual. Este caso es distinto: fueron casi 25 páginas, muy articuladas, lo que nos hace sospechar que alguna agencia de inteligencia buscaba manipular o influir en la investigación”, declaró Zúñiga en una entrevista con la periodista Amelia Rueda.

Información filtrada y señalamientos contra el régimen Ortega-Murillo

El documento anónimo filtrado a medios costarricenses como La Nación y CR Hoy vincula a Robles Murillo con el Ejército de Nicaragua y con el Batallón de Lucha Irregular “Sócrates Sandino”. También afirma que habría recibido entrenamiento en Cuba y Rusia en tácticas de inteligencia y atentados.

Aunque Zúñiga advirtió que no puede sostener, de momento, que se trate de un crimen político, admitió que “alguna agencia de gobierno tenía interés en que el caso se interpretara de esa manera”. Por su parte, la Fiscalía General de Costa Rica no descarta un móvil político. El fiscal Carlo Díaz aseguró que una de las líneas de investigación apunta a que el asesinato fue ordenado por el Ejército nicaragüense.

Organismos de derechos humanos y la viuda de Samcam coinciden en señalar que el exmilitar fue asesinado por su papel como voz crítica del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo. El mayor en retiro, de 67 años, denunció en varias ocasiones la participación del Ejército en la represión de las protestas de 2018 en Nicaragua.

Un crimen en el exilio

Samcam fue acribillado en su apartamento de San José, donde vivía exiliado desde 2018. Su asesinato se suma a una serie de ataques contra opositores nicaragüenses en el exterior. Un informe presentado en Ginebra por el Grupo de Expertos en Derechos Humanos sobre Nicaragua (GHREN) advierte que la dictadura Ortega-Murillo ha desplegado una red transnacional de inteligencia y hostigamiento contra disidentes, incluso fuera de las fronteras del país.

El OIJ capturó el 12 de septiembre a cuatro sospechosos vinculados con el crimen. Tres permanecen en prisión preventiva, mientras que una cuarta fue liberada tras la audiencia judicial. El presunto gatillero, identificado como Luis Carvajal Fernández, de 20 años, sigue prófugo.

Entre los detenidos figura Danilo Chaves Medina, señalado como intermediario entre los autores intelectuales y materiales del asesinato. A otro de los capturados, Luis Orozco González, se le encontró en su teléfono una fotografía de la vicepresidenta nicaragüense Rosario Murillo, un detalle que las autoridades restaron importancia dentro de la investigación.

Mientras la justicia costarricense intenta esclarecer quién ordenó el crimen, el caso de Roberto Samcam continúa rodeado de interrogantes. La sospechosa participación de agencias de inteligencia extranjeras y la presión política que rodea la investigación reflejan la complejidad de un homicidio que trasciende lo personal y se inscribe en el marco de la represión transnacional del régimen Ortega-Murillo.