Dictadura desampara a pacientes con cáncer

Pacientes con cáncer en el departamento de León, Nicaragua, se enfrentan a la falta de médicos especialistas, es decir oncólogos, los que han sido despedidos por la administración sandinista. La población en León se encuentra a la espectativa de la apertura de un nuevo y supuestamente moderno hospital, que remplazará las ruinas en las que está convertido el Hospital Oscar Danilo Rosales.

ESCENARIO NACIONALNACIÓN

Darío Medios

7/30/20252 min read

Pacientes con cáncer en el departamento de León, Nicaragua, se enfrentan a la falta de médicos especialistas, es decir oncólogos, los que han sido despedidos por la administración sandinista. La población en León se encuentra a la espectativa de la apertura de un nuevo y supuestamente moderno hospital, que remplazará las ruinas en las que está convertido el Hospital Oscar Danilo Rosales.

Sin embargo la realidad es que las sillas y paredes a estrenar no compensan la necesidad de oncólogos con experiencia que salven la vida de pacientes que luchan contra el cáncer. Aún así, el sistema de salud lanzó el Comité de Oncología, sin oncólogos que dirijan el programa

Un acto contradictorio.

Fue un médico participante del evento quien alertó de la situación, que puede costar la vida de los pacientes, al negarles el derecho a una atención de calidad. El informante filtró a medio locales que los únicos oncólogos que tenía el HEODRA eran los especialistas Aaron Delgado y Juan José Mendoza.

Ambos fueron despedidos por no sumirse a disposiciones políticas, mostrar desinterés en marchas y mitines sandinistas. A pesar de su vasta experiencia e importante trayectoria, la dictadura y los administradores del sector salud, prescindieron de sus servicios, dejando a sus pacientes a su suerte.

Este mismo mes de julio se filtró de los despidos injustificados de especialistas y también renuncias de quienes no soportaron la opresión en los pasillos de los hospitales. Ahora el Heodra carece de al menos tres neonatólogos y varios internistas. Estas decisiones son preocupantes, ya que se trata de especialistas indispensables, un total desmantelamiento del sistema de salud que pone en riesgo la atención de pacientes críticos.

Radiografía del sistema de salud en Nicaragua

El sistema de salud en Nicaragua enfrenta una severa crisis por la escasez de médicos, ubicando al país entre los que tienen menos profesionales de la salud por habitante en América Latina. Organizaciones médicas alertan que la demanda supera con creces la capacidad instalada, agravada por la falta de personal especializado, el cierre de espacios de formación profesional independiente y el éxodo de médicos hacia el exilio o el sector privado.

A la escasez se suma un entorno laboral marcado por la inseguridad y el control político. Médicos y personal sanitario enfrentan presiones constantes por parte del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo, que exige lealtad política, restringe el criterio médico independiente y ha criminalizado a profesionales por denunciar deficiencias o atender a manifestantes en el contexto de la represión.

La situación ha generado un colapso silencioso en hospitales públicos, donde los tiempos de espera se extienden, hay desabastecimiento de insumos y se improvisan soluciones ante la falta de recursos humanos. Mientras tanto, la dictadura mantiene un discurso triunfalista sobre la atención médica gratuita, ignorando la realidad de un sistema debilitado por la politización, la represión y la falta de inversión sostenida en el talento humano.