Día del Trabajador en Nicaragua: Nada que celebrar

Nicaragua continúa teniendo los salarios más bajos en Centroamérica. Existe un crecimiento de empleo informal ante la falta de oportunidad para acceder a empleos de calidad, los sindicatos se han anexado a las políticas partidarias del régimen y ahora defienden los intereses de la dictadura y no de los trabajadores.

ESCENARIO NACIONALNACIÓN

Darío Medios

5/1/20253 min read

No importa si sos un trabajador del estado, o de la empresa privada, las condiciones laborales en Nicaragua son muy parecidas en ambos sectores. Salarios bajos imposibles de cubrir la canasta básica, cero posibilidades de organización y violaciones a las leyes laborales.

Aunque muchos coinciden que si sos trabajador del estado, debes sumar la represión, las amenazas, la vigilancia constante y el verte obligado a participar de actividades políticas. No hay posibilidad de negarse, el castigo es el despido, pero también podría suponer cárcel y hasta el destierro.

Nicaragua continúa teniendo los salarios más bajos en Centroamérica. Existe un crecimiento de empleo informal ante la falta de oportunidad para acceder a empleos de calidad, los sindicatos se han anexado a las políticas partidarias del régimen y ahora defienden los intereses de la dictadura y no de los trabajadores.

El Día del Trabajador en Nicaragua lejos de ser una fecha de conmemoración, de promoción y reivindicación de derechos, se ha convertido en un día para reflexionar en silencio, sobre la situación laboral del país y las dificultades que enfrentan los trabajadores en todos los sectores.

Desde octubre de 2023 hasta julio de 2024, más de 1,100 empleados del Poder Judicial han sido despedidos en todo el país

Desde el inicio de las protestas ciudadanas en abril de 2018, la dictadura Ortega Murillo, ha impuesto el terror a los trabajadores públicos, en las instituciones se comenta de las “purgas” y castigos a quienes se atrevieron a mostrar respaldo a la ciudadanía o la iglesia católica.

Una de las instituciones públicas donde se evidenciaron las llamadas “barridas” ha sido el Poder Judicial. Desde octubre de 2023 hasta julio de 2024, más de 1100 empleados del Poder Judicial han sido despedidos en todo el país, según fuentes vinculadas a ese poder del Estado. Cualquiera puede ser despedido, en cualquier momento.

El aumento de la centralización, la compactación de las instituciones estatales para un mejor control de los trabajadores, pueden ser las principales razones de los despidos. Ningún trabajador del estado está seguro en su puesto.

Algunos opositores consideran también la posibilidad que la dictadura se ha visto afectada económicamente por las sanciones internacionales y que esto los ha obligado a reducir sus trabajadores, sometiendo a los empleados públicos a un estrés constante, ante el temor del despido.

OIT da seguimiento a Nicaragua

A nivel internacional Nicaragua, es considerada como uno de los países con violaciones a los derechos laborales a nivel mundial. Así lo evidencio un reciente informe de la Organización Internacional del trabajo, durante la 111ª reunión de la Conferencia Internacional del Trabajo en 2023.

Lejos de atender las recomendaciones y resoluciones internacionales para mejorar la condición de las y los trabajadores la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo optó por abandonar la OIT, a pesar de ello Nicaragua sigue bajo la lupa.

El Consejo de Administración de la OIT creó este año una “Comisión de Encuesta” para Nicaragua. Este es el mecanismo de investigación de más alto nivel del organismo internacional y se activa cuando un Estado miembro es acusado de violaciones graves y persistentes a los convenios internacionales laborales y se niega reiteradamente a resolverlos.

Trabajadores de instituciones publicas son obligado a participar de actividades políticas y formar parte de fuerzas paramilitares

Trabajadores indefensos

Recientemente José Ángel Bermúdez, el secretario ejecutivo del Frente Nacional de los Trabajadores, en un medio de comunicación de la Asamblea Nacional, aseguró que la situación laboral en Nicaragua ha mejorado gracias a Daniel Ortega y que los sindicatos marchan muy bien.

Pero la realidad indica todo lo contrario. El último aumento del salario mínimo aprobado en Nicaragua fue de apenas un 4%, y únicamente para nueve sectores, este aumento queda lejos para cubrir los costos de la canasta básica, que según el banco central supera los C$ 21,000 córdobas.

El derecho una verdadera libertad sindical en Nicaragua ha quedado solamente como un recuerdo. En la mayoría de los países democráticos son los movimientos sindicales los que logran mejoras en la situación de los trabajadores y acompañan sus demandas. Pero en Nicaragua el Frente Nacional de Los Trabajadores está lejos de cumplir esa misión.