Un incidente de presunta agresión contra una niña en una tienda china del concurrido mercado Roberto Huembes en Managua, ha desatado la indignación de ciudadanos nicaragüenses quienes confrontaron a los trabajadores del establecimiento. La menor de edad al parecer tomó un lápiz labial, lo que habría provocado la violenta reacción de una empleada de nacionalidad china.

La situación escaló rápidamente cuando un grupo de personas se congregó en el lugar para defender a la menor y exigir explicaciones. La atención fue tal que los trabajadores de la tienda china se vieron obligados a llamar a la policía nacional que acudió al lugar para resguardar el local ante el temor de un linchamiento.

Este suceso no es un hecho aislado. A él se suman denuncias previas de agresiones atribuidas a ciudadanos chinos en Nicaragua. En Estelí, por ejemplo, propietarios de la tienda Estrella China fueron señalados por agredir a jóvenes emprendedores. Asimismo, circulan rumores sobre administradores chinos que supuestamente golpean a sus propios trabajadores por errores o desacato dentro de las tiendas.

Presencia de comercio chino en aumento

El aumento de la presencia comercial china en Nicaragua ha sido notoria, especialmente tras la formalización del Tratado de Libre Comercio con el gigante asiático en 2023. Este acuerdo junto con otros beneficios arancelarios ha impulsado la importación de productos y la llegada de ciudadanos chinos para establecer negocios en el país.

Ciudades como Managua, Matagalpa, Estelí, Chinandega y León han sido testigos de la expansión de estas tiendas chinas que a menudo reemplazan antiguas viviendas demolidas o locales renovados. Si bien este crecimiento es imparable, también ha generado preocupación entre los comerciantes locales, quienes se perciben asfixiados.

La impunidad percibida en estos casos ha alimentado la frustración ciudadana, especialmente cuando se trata de agresiones. La dictadura sandinista que se jacta de resguardar la soberanía de Nicaragua no aplica su discurso cuando de los chinos se trata, por lo que hay un clamor por el respeto y la protección de los derechos de los nicaragüenses en su propio territorio.