A pocas horas de iniciar el cónclave

Los cardenales que deberán elegir al futuro papa en el cónclave, desde este miércoles 6 de mayo de 2025, lo harán aislados en la Capilla Sixtina y votando día tras día, en un ciclo de escrutinios que prevé pausas y límites, hasta lograr un acuerdo para la elección del sucesor del papa Francisco.

MUNDO

DaríoMedios

5/6/20253 min read

El inicio del cónclave para elegir al nuevo papa se lleva a cabo bajo un estricto protocolo litúrgico y ceremonial, que comienza con la misa Pro eligiendo Pontífice y continúa con las votaciones diarias en la Capilla Sixtina, donde la señal de humo indicará si hay o no consenso.

El método de elección del pontífice está regulado milimétricamente en la constitución apostólica Universi Dominici Gregis y otros documentos vaticanos y, ante la eventualidad de que se alargue, prevé una serie de pausas de reflexión y salidas.

Todo este proceso, de acuerdo al estricto protocolo vaticano, deberá transcurrir en la más absoluta discreción, sin que los cardenales electores salgan de los dominios vaticanos. Un cardenal será elegido papa si consigue el respaldo de la mayoría de al menos dos tercios de los cardenales, en este caso 89, ya que los electores ascienden a un total de 133.

Los votos serán quemados tras el recuento en una estufa instalada ya para la ocasión en la Capilla Sixtina y el color del humo anunciará al mundo exterior el resultado: el negro indicará que no hay acuerdo; el blanco precederá el famoso Hambemus papam.

Los cardenales que deberán elegir al futuro papa en el cónclave, desde este miércoles 6 de mayo de 2025, lo harán aislados en la Capilla Sixtina y votando día tras día, en un ciclo de escrutinios que prevé pausas y límites, hasta lograr un acuerdo para la elección del sucesor del papa Francisco.

Los últimos cónclaves han sido generalmente rápidos: Francisco fue elegido en 2013 en la quinta votación, Benedicto XVI en 2005 en la cuarta y Juan Pablo II en 1978 en la octava, aunque otros se alargaron más, como el de Pío XI en 1922, que requirió catorce.

Pietro Parolin principal candidato

A pocas horas del inicio del Cónclave, ahora es el actual Secretario de Estado, Pietro Parolin, quien parte como el principal candidato a suceder al pontífice argentino. El 31 de agosto de 2013, y tras el cónclave del que salió elegido papa Francisco, Parolin fue nombrado secretario de Estado Vaticano, el equivalente a primer ministro de la Santa Sede.

Como secretario de Estado del Vaticano, Parolin es una de las figuras más poderosas de la Curia. Diplomático de carrera, ha jugado un papel clave en negociaciones internacionales, como el acuerdo con China sobre el nombramiento de obispos.

Gran conocedor de la Curia y con un gran bagaje diplomático, Pietro Parolin se convirtió en el segundo Secretario de Estado más joven en la historia de la Santa Sede, detrás del cardenal Eugenio Pacelli, que luego fue el papa Pío XII.

Además de su idioma, el italiano, habla inglés, francés y español, y desde 2005 es caballero de la Gran Cruz de la Orden al Mérito de la República Italiana. Aunque moderado y pragmático, su cercanía al poder vaticano lo sitúa en una posición intermedia entre el progresismo de Francisco y el conservadurismo de Benedicto XVI.

Aunque Cualquiera que intente predecir el resultado debería recordar que Jorge Mario Bergoglio fue considerado demasiado mayor para ser elegido papa en 2013, a sus 76 años, y que Karol Wojtyla no figuraba en ninguna de las listas de favoritos antes del cónclave de 1978 que lo eligió como papa Juan Pablo II.

Un dicho popular en los círculos del Vaticano dice que si "entras en un cónclave como papa, sales como cardenal". Esto implica que el proceso es sagrado y secreto no es un concurso de popularidad ni una campaña, sino la elección divinamente inspirada del Vicario de Cristo en la Tierra.