En una medida que promete transformar el panorama migratorio de Estados Unidos, la Casa Blanca anunció este miércoles 17 de julio de 2024 un nuevo proceso que permitirá a los cónyuges e hijos de ciudadanos estadounidenses solicitar la residencia permanente sin tener que abandonar el país. Este anuncio marca un avance significativo en la política migratoria de la administración de Joe Biden, quien ha descrito esta iniciativa como una de “sentido común” y que “mantiene a las familias juntas”.
Hasta ahora, los inmigrantes indocumentados que estaban casados con ciudadanos estadounidenses se enfrentaban a un proceso arduo y prolongado para obtener la residencia permanente. Este proceso requería que abandonaran Estados Unidos y regresaran a sus países de origen para solicitar la residencia a través de los consulados estadounidenses, lo cual podía implicar años de separación de sus familias y una profunda incertidumbre sobre su futuro.
La nueva medida, que entrará en vigor el 19 de agosto de 2024, permitirá a los beneficiarios permanecer en Estados Unidos durante el proceso de solicitud. Esto es un alivio considerable para muchas familias que han vivido con el temor constante de la deportación y la separación familiar.
Detalles del programa
El Departamento de Seguridad Nacional de EE.UU. (DHS) ha estimado que alrededor de medio millón de cónyuges de ciudadanos estadounidenses y 50,000 hijos no ciudadanos podrían beneficiarse de este nuevo proceso. Los solicitantes aprobados recibirán un permiso de permanencia temporal de tres años, durante los cuales podrán iniciar el proceso de solicitud de residencia permanente y serán elegibles para permisos de trabajo.
Para ser elegibles, los solicitantes deben cumplir con ciertos requisitos estrictos:
– Haber residido continuamente en Estados Unidos durante al menos diez años antes del 17 de junio de 2024.
– Estar casados con un ciudadano estadounidense antes de esa fecha.
– No tener antecedentes penales descalificatorios ni representar una amenaza para la seguridad nacional o pública.
– Además, ciertos hijos de los solicitantes también pueden ser considerados si estaban físicamente presentes en Estados Unidos antes del 17 de junio de 2024.
Documentación requerida
Aunque el proceso de solicitud comenzará oficialmente el 19 de agosto, las autoridades migratorias han indicado que los posibles beneficiarios pueden empezar a reunir la documentación necesaria. Entre los documentos requeridos se incluyen:
– Certificados de matrimonio y prueba de la ciudadanía estadounidense del cónyuge.
– Pruebas de identidad, como pasaportes y licencias de conducir.
– Documentación que demuestre la presencia continua en Estados Unidos durante los últimos diez años, como recibos de alquiler, facturas de servicios públicos, registros escolares y médicos, entre otros.
– Para los hijos no ciudadanos, será necesario presentar evidencia de la relación con el solicitante y su presencia en Estados Unidos antes de la fecha límite.
Un discurso significativo
El presidente Biden formalizará este anuncio en su discurso en la conferencia anual de UnidosUS en Las Vegas este miércoles. UnidosUS, la organización latina de defensa de los derechos civiles más grande de Estados Unidos, ofrece una plataforma clave para destacar las políticas que afectan a la comunidad latina. En contraste, la Convención Nacional Republicana en Milwaukee, Wisconsin, también está en marcha, con la inmigración y la seguridad como temas centrales.
Reacciones y expectativas
La comunidad inmigrante y sus defensores han recibido con optimismo este anuncio, ya que representa un avance significativo hacia la reunificación familiar y la regularización del estatus migratorio de miles de personas. Sin embargo, también hay expectativas sobre la implementación y los posibles desafíos que puedan surgir en el camino.
Es importante destacar que, aunque esta medida brinda una solución esperada y necesaria para muchas familias, aún quedan aspectos por aclarar, como los costos de la solicitud y los detalles específicos de la plataforma de solicitud. Estos serán cruciales para la correcta implementación y el éxito del programa.
La introducción de este nuevo proceso por parte de la administración Biden subraya un compromiso renovado con una política migratoria más humana y racional. Permitir que los cónyuges e hijos de ciudadanos estadounidenses soliciten la residencia permanente sin abandonar el país no solo evita la separación familiar, sino que también proporciona un camino más claro y accesible hacia la legalización.
Este anuncio es un paso importante hacia la construcción de un sistema migratorio que respete la dignidad y los derechos de todas las personas, mientras se asegura de que las familias puedan permanecer juntas. La comunidad inmigrante y sus aliados seguirán de cerca el desarrollo de esta iniciativa, con la esperanza de que se traduzca en una realidad tangible que beneficie a miles de familias en todo el país.