Los accidentes de tránsito, la inseguridad ciudadana y el consumo de drogas continúan cobrando la vida de los nicaragüenses.
María Amparo Rizo Duarte, de 45 años, Iris Nayeny Rizo Duarte, de 4 meses, y la niña Mia Nareydi Rizo Miranda, de 2 años, murieron tras sufrir un accidente de tránsito el pasado 28 de septiembre, cuando la camioneta con placa TS 4550 en la que viajaban se volcó en el sector El Bálsamo, en la carretera Siuna-Waslala.
En el mismo accidente resultaron lesionados Yeniri Franchell Rizo Duarte, con fractura de fémur y pelvis; Melkin Antonio López Martínez; Dereck Samir Rizo Duarte; Iris Nayeny Rizo Duarte y Luis Pablo Miranda, todos con traumatismo craneoencefálico leve. Los heridos fueron trasladados al hospital Carlos Centeno, según informaron medios locales.
Por otro lado, el joven Freddy Esmir Nua Danly, de 17 años, murió al impactar la motocicleta en la que viajaba contra un furgón, al invadir el carril contrario, el 28 de septiembre en el municipio de Rosita, Triángulo Minero.
También el pasado sábado, Bomberos Unidos y la Policía encontraron el cuerpo sin vida de Sinia Gabriela Ramos, de 22 años, quien se lanzó al río Grande de Matagalpa y fue arrastrada por la corriente. La familia de la fallecida desconoce las razones que tuvo para suicidarse, pero suponen que podría haber estado bajo el efecto de sustancias alucinógenas que solía consumir.
Ese mismo sábado, en la comunidad de Buena Vista, municipio de El Castillo, el joven Samuel Beltrán, de 28 años, murió tras recibir una cuchillada en el tórax durante una riña en un bar. La Policía no ha brindado mayor información sobre el incidente.
Asimismo, Luis David Mitchell Garth, de 28 años, quien se dedicaba a la pesca artesanal, falleció el 28 de septiembre tras ser herido por sujetos de identidad desconocida cuando regresaba de trabajar. Medios informaron que el móvil del crimen podría estar relacionado con el robo de sus pertenencias, que llevaba en una mochila.
Accidentalidad, fatalidad y criminalidad crecen en el país
Una experta en temas de seguridad declaró a Darío Medios Internacional que la delincuencia está actuando con mayor violencia en Nicaragua, y que la ola de accidentes de tránsito es imparable debido a la falta de una intervención integral de la Policía, que parece más interesada en la recaudación de multas que en la protección de la vida de los ciudadanos.
La especialista subrayó que los asaltos con víctimas mortales ocurridos en las últimas semanas son una clara evidencia del problema, alertando sobre un grave aumento en la peligrosidad.
Indicó además que, desde la rebelión de abril de 2018, la delincuencia y criminalidad en el país han adoptado esquemas diferentes, influenciados por la crisis sociopolítica provocada por la dictadura de Ortega-Murillo.