El sacerdote nicaragüense Jaime Iván Montesinos Sauceda, fue asignado como párroco en la Parroquia San Isidro Labrador, en el municipio de Güinope, en el departamento El Paraíso, jurisdicción eclesiástica de la Diócesis de Danlí en Honduras.
A través de redes sociales, monseñor José Antonio Canales Motiño, obispo de Danlí, oficializó el nombramiento del padre Montesinos a través de un comunicado emitido este jueves 2 de enero, en conmemoración del octavo aniversario de esa Diócesis.
El padre Montesinos se desempeñaba como titular de la Parroquia San Juan Pablo II, en la comarca Villa Chagüitillo, en el municipio de Sébaco, departamento de Matagalpa, cuya diócesis es pastoreada por monseñor Rolando Álvarez Lagos.
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Montesinos fue apresado por la Policía sandinista el 23 de mayo de 2023 cuando circulaba en una carretera del municipio de San José de los Remates, en el departamento de Boaco.
La Policía detalló que el cura fue detenido a la altura del Kilómetro 104, carretera hacia el municipio de Esquipulas, departamento de Matagalpa.
Desterrado a Roma
El sacerdote Jaime Montesinos habría sido acusado por menoscabo, una figura jurídica creada por la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo para encarcelar y silenciar a todas las voces críticas hacia su régimen.
El 12 de octubre de 2023, el padre Montesinos fue parte del grupo de los primero 12 sacerdotes desterrados y enviados a Roma el 18 de octubre de ese mismo año.
Tras su destierro, el cura fue acogido por la Diócesis de Danlí, en la Iglesia Santa Cruz, también en El Paraíso, donde se encontraba hasta ser designado como párroco de San Isidro Labrador, una de las 11 parroquias de la Diócesis de Danlí.
Antes de asumir la parroquia San Juan Pablo II, el padre Montesinos fue el párroco en el Santuario Diocesano de Nuestro Señor de Esquipulas, en el municipio de Esquipulas, Matagalpa.
