El presidente guatemalteco, Bernardo Arévalo, se reunió con el periodista excarcelado José Rubén Zamora dos días después de haber abandonado la prisión en la que estuvo preso más de 800 días sin condena.
La reunión se realizó en horas de la tarde del lunes en la casa del periodista, sin convocar a la prensa y en un ambiente “de diálogo franco y respetuoso con un enfoque en temas clave para el futuro del país”, dijo la presidencia guatemalteca.
Según el gobierno, Zamora compartió su experiencia vivida en prisión durante más de dos años. El periodista ha denunciado que sufrió vejámenes durante su encarcelamiento, ocurrido en su mayor parte durante el gobierno del expresidente Alejando Giammattei (2020-2024).
El comunicador permanece en arresto domiciliario mientras se ventilan los dos procesos en su contra.
“Ambos discutieron proyectos de país que contribuyen al fortalecimiento de las instituciones democráticas, en particular, el papel del periodismo y la libertad de expresión en la construcción de una Guatemala más justa y transparente”, dijo.
La presidencia confirmó la reunión y envió una fotografía a periodistas en las que se puede ver a Arévalo y a Zamora abrazados en la sala del periodista.
Ambos discutieron la relevancia de la liberación del periodista “como una oportunidad para cesar la persecución política en Guatemala y la liberación de quienes aún sufren de una prisión, fruto de investigaciones espurias y medidas arbitrarias (de la fiscalía)”, dijo en un mensaje enviado a la prensa.
Dos casos en su contra
La fiscalía acusa al periodista de 68 años, en dos casos distintos, uno de ellos por lavado de dinero, donde le habría pedido a un amigo que bancarizara unos 38.000 dólares que, según Zamora, eran producto de una donación para El Periódico, el medio de comunicación del que era presidente. El medio se especializaba en temas de corrupción y cerró luego de la detención del periodista.
Zamora es reconocido en el mundo periodístico por haber presidido un medio que destapó varios casos de corrupción en Guatemala.
La defensa de Zamora ha dicho que él mismo no bancarizó el dinero porque la persona que había hecho la donación no quería recibir represalias por financiar al medio. El dinero nunca entró al sistema bancario.
El periodista fue condenado a seis años por este caso, pero el fallo fue anulado por fallas en el debido proceso. El tribunal que conoce esa causa le dio medidas sustitutivas a la prisión, pero no pudo abandonarla por un segundo caso en su contra.
En ese segundo proceso, la fiscalía acusa a Zamora de conspiración para obstruir la justicia por supuestamente mentir en el primer caso en su contra. Se le añadió otra acusación de falsificar documentos por presuntamente no firmar las boletas migratorias que usaba para salir del país.
Tras las acusaciones contra Zamora, la fiscalía abrió investigación contra ocho periodistas y columnistas que escribían sobre su caso e investigaban a jueces y fiscales por abusos de poder. Los ocho están exiliados.