En un significativo avance en sus relaciones bilaterales, Nicaragua y China firmaron este viernes, 12 de julio de 2024, una serie de documentos destinados a ampliar la cooperación entre ambos países. Estos acuerdos fueron rubricados en Pekín por Laureano Facundo Ortega Murillo, hijo del presidente nicaragüense Daniel Ortega y de la vicepresidenta Rosario Murillo, junto a Luo Zhaohui, titular de la Agencia China de Cooperación Internacional para el Desarrollo (CIDCA).
Entre los documentos firmados se destaca un Memorándum de Entendimiento sobre la planificación de la cooperación para el desarrollo entre ambos países para el período 2025-2027. Este acuerdo, firmado entre la Agencia de Cooperación Internacional para el Desarrollo de la República Popular China y la Secretaría de la Presidencia de Nicaragua, es una clara señal del compromiso de ambas naciones de trabajar juntas en áreas clave para el desarrollo mutuo.
Otro acuerdo relevante es el Convenio de Cooperación Económica y Técnica, que establece un marco para la colaboración en áreas económicas y técnicas, prometiendo beneficios significativos para ambos países. Además, se firmó un canje de notas sobre el suministro de autobuses procedentes de China para el transporte público en Nicaragua, lo que representa un paso importante hacia la modernización del transporte público nicaragüense.
La firma de estos documentos tuvo lugar en el contexto de la Segunda Conferencia de Alto Nivel del Foro de Acción Global Compartida, organizada por China. La delegación nicaragüense, encabezada por Ortega Murillo, quien funge como asesor presidencial para las Inversiones, Comercio y Cooperación Internacional, incluyó al ministro asesor del presidente para Asuntos Internacionales, Valdrack Jaentschke, y al embajador de Nicaragua en China, Michael Campbell.
Es importante señalar que Laureano Ortega Murillo, quien ha sido sancionado por Estados Unidos y la Unión Europea por graves violaciones a los derechos humanos y por su apoyo a las controvertidas elecciones de 2021 en Nicaragua, fue otorgado plenos poderes por su padre, el presidente Ortega, el pasado 9 de julio para firmar estos acuerdos en representación del Gobierno de Nicaragua.
El fortalecimiento de las relaciones entre Nicaragua y China ha sido una prioridad para el gobierno de Daniel Ortega. El 20 de diciembre de 2023, Ortega describió el acuerdo para elevar las relaciones diplomáticas con China al nivel de “asociación estratégica” como un “mejor regalo navideño” y “una gran noticia”. Este desarrollo se oficializó tras una conversación telefónica entre Ortega y el presidente chino, Xi Jinping, el 19 de diciembre de 2023.
Las relaciones diplomáticas entre China y Nicaragua tienen una historia que se remonta a diciembre de 1985, durante el primer gobierno sandinista. Sin embargo, en 1990, el gobierno de Violeta Barrios de Chamorro estableció lazos con Taiwán, una situación que cambió en diciembre de 2021 cuando Nicaragua rompió relaciones con Taiwán y las reanudó con China, alineándose con la política de una sola China de Beijing.
En otro ámbito de la política exterior nicaragüense, el embajador de Nicaragua en Irán, Ramón Moncada Colindres, realizó recientemente una visita de trabajo a la provincia de Chahar Mahal y Bajtiarí. Durante su visita, Moncada tuvo la oportunidad de explorar las capacidades comerciales de la región iraní y discutir posibles áreas de cooperación. En reuniones con empresarios locales, se analizaron oportunidades para fortalecer el intercambio comercial entre Nicaragua y la provincia iraní, con un enfoque en productos como carne roja y café.
La visita de Moncada subraya la estrategia de Nicaragua de diversificar sus relaciones internacionales y buscar nuevos mercados para sus productos. Los empresarios iraníes mostraron un gran interés en participar en proyectos de desarrollo en Nicaragua y en el intercambio comercial de productos como acero, cemento y derivados petroquímicos.
El fortalecimiento de las relaciones con China e Irán refleja la política exterior de Nicaragua de buscar aliados estratégicos que puedan ofrecer apoyo en áreas clave para el desarrollo del país. Estos acuerdos no solo tienen el potencial de impulsar el crecimiento económico, sino que también representan un desafío para la diplomacia internacional, especialmente en el contexto de las sanciones impuestas por Estados Unidos y la Unión Europea a altos funcionarios nicaragüenses.
La firma de estos acuerdos con China y la visita del embajador Moncada a Irán son pasos significativos en la búsqueda de Nicaragua de fortalecer sus relaciones internacionales y diversificar sus socios comerciales. Estos desarrollos tienen el potencial de traer beneficios económicos sustanciales a Nicaragua, al mismo tiempo que plantean desafíos diplomáticos que el país deberá navegar con cuidado en los próximos años.