Este miércoles, 24 de enero, se conmemora el Internacional de la Educación como un derecho humano y una responsabilidad para los gobiernos que deben de garantizar el desarrollo intelectual de sus ciudadanos.
A diferencia de otros países democráticos, Nicaragua llega a esta fecha en medio de persecución, secuestros, confiscaciones de universidades y exilio de decenas de estudiantes, debido a la ola autoritaria por parte del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
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Luego de las protestas sociales en 2018, la administración orteguista ordenó el despido de más de una decena de profesores de primaria, secundaria y universidades.
Además, secuestró y condenó por supuestos actos terroristas a académicos como los profesores de educación secundaria Gabriel Putoy y Juan Bautista Guevara.
Asimismo encerró en la cárcel al catedrático de la extinta Universidad Politécnica de Nicaragua (UPOLI), Ricardo Baltodano, los que luego de ser liberados en 2019, por la polémica Ley de Amnistía, se vieron obligados a exiliarse para poder proteger sus vidas.
Cierre de universidades y secuestro de estudiantes
En este Día Internacional de la Educación se recuerda el secuestro de estudiantes nicaragüenses, a los que la dictadura orteguista criminalizó su derecho a la protesta.
Entre los estudiantes que fueron secuestrados y que luego tuvieron que exiliarse o fueron desterrados están los líderes estudiantiles Bayron Estrada, estudiante expulsado de la carrera de Odontología en la UNAN León, y Amaya Coppens, a los que la dictadura orteguista les negó el derecho a la educación.
Otros líderes estudiantiles que también fueron objeto de arrestos son Max Jerez, Lesther Alemán y Yubrank Suazo, expulsados de Nicaragua el nueve de febrero del 2023.
La justicia orteguista también mantiene tras las rejas, desde agosto del 2023, a las jóvenes activistas y líderes unibersitaria Adela Espinoza Tercero, Gabriela Morales y Mayela Campos Silva, quienes además de la acusación de «propagación de noticias falsas» y «menoscabo a la integridad nacional», el Ministerio Público las acusó del delito de tráfico de estupefacientes.
No contento con esto, el dictador Daniel Ortega ha ilegalizado y conficado al menos 29 universidades entre 2021 y agosto del 2023, entre las que están la Universidad Politécnica de Nicaragua, Universidad Nicaragüense de Estudios Humanitarios, Universidad Popular Nicaragüense, Universidad Hispanoamericana (Uhispam), Universidad Paulo Freire y la Universidad Centroamericana (UCA).
Críticos y opositores han afirmado que el propósito de la dictadura Ortega-Murillo es crear universidades a su medida, para adoctrinar a los estudiantes.
Panorama desolador en la educación en Nicaragua
Para el líder estudiantil Enrique Martínez, vocero de AVANZA, y de la Plataforma de Unidad por la Democracia (PUDE), el «Día Internacional de la Educación es un espacio para resaltar las virtudes y aportes que se desglosan de ella, donde encontramos la libertad académica, el pensamiento crítico y el desarrollo social».
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Sin embargo subrayó que en el caso de Nicaragua, el panorama es desolador, porque asegura que los estudiantes se encuentran «ante múltiples violaciones a este derecho humano, entre ellas expulsiones, restricciones sobre su acceso, influencia política-partidaria, manipulación de información».
Agregó, además, que los estudiantes están siendo víctimas de «reducción de la calidad, represión del pensamiento crítico, y por ende, la libertad de expresión, y sometimiento de la voluntad de la juventud por medio del adoctrinamiento a favor del FSLN».
Por otra parte, Martínez señaló que no se debe olvidar que la Unión Nacional de Estudiantes de Nicaragua (UNEN) ha traicionado la «esencia de defensa que descansa en el estudiantado y que hoy vive en los liderazgos estudiantiles emergentes que alzan sus voces en el exilio (…)».
«Debido a esto, en Nicaragua no hay nada que resaltar, sino denunciar esta situación crítica que está acabando con el presente y el futuro de la juventud nicaragüense», remarcó.
Día Internacional de la Educación, momento negro para Nicaragua
Por su parte, el líder estudiantil y exreo político Bayron Estrada dijo a Darío Medios Internacional que Nicaragua vive un día negro, ya que recordó que la «educación es la base fundamental para salir de la pobreza, en cambio Ortega arremete contra los estudiantes, que tienen la convicción de reclamar».
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«Este Día Internacional de la Educación también es gris para los maestros que son los que han forjado por años una lucha incansable para educar a la niñez, a la adolescencia y a la juventud nicaragüense y encaminarla hacia una vida de futuro, pero las políticas de la dictadura han sido contrarias a las buenas obras que han hecho los maestros y maestras», sostuvo Estrada.
Otras de las situaciones que expresó el exreo político, originario del departamento de León, es que preocupa que a los estudiantes y maestros en Nicaragua se les está coartando derechos constitucionales, porque afirma que en el país no existe una educación libre y gratuita.
Otras de las preocupaciones que detalló el opositor es que la pérdida de la calidad académica recae en su totalidad en estabilidad económica del país, «porque si no hay educación de calidad no habrá mano de obra calificada».
Ipen denuncia ataques continuos del régimen de Ortega
En este día, la Iniciativa Puentes por los Estudiantes de Nicaragua (Ipen), aprovechó para denunciar los ataques continuos del régimen autoritario de Nicaragua en contra de la educación, afirmando que el orteguismo realiza «acciones como el adoctrinamiento político partidario en las instituciones educativas en todos sus niveles».
«La pérdida de autonomía universitaria y confiscaciones de universidades privadas es reflejo de un completo desprecio e irrespeto a la libertad académica, y que se suma, además, a los preexistentes agravios como expulsiones estudiantiles, encarcelamientos, despidos y persecución de la comunidad académica e Incluso asesinato de estudiantes», destacó.
Los integrantes de Ipen expresaron, a la vez, su preocupación por el secuestro de estudiantes, por lo que demandaron su liberación inmediata, «así como la libertad para el catedrático Freddy Quezada, detenido arbitrariamente por haber ejercido su derecho a la libertad de expresión».
Pese a que en el presupuesto general para este 2024 en Nicaragua, el sistema educativo público tiene asignado 26 mil 27 millones de córdobas, el régimen de Ortega sigue con su detrimento en la educación, donde los maestros de educación secundaria tienen un salario que no supera los 10 mil córdobas.
A la vez sigue con su hostigamiento a los docentes, manteniendo así en la cárcel al profesor universitario freddy Quesada, de quien no se sabe nada sobre su condición física y situación legal.