Este lunes 22 de julio de 2024, la Red Latinoamericana de Jóvenes por la Democracia (JuventudLAC) junto con la Fundación para la Democracia Panamericana y Ofelia Acevedo, viuda de Oswaldo Payá, anunciaron que la sexta edición del Premio “Oswaldo Payá: Libertad y Vida” ha sido otorgada a Monseñor Rolando Álvarez.

Este galardón, que honra la memoria del líder cívico cubano asesinado hace doce años, reconoce a aquellos individuos o instituciones que han realizado contribuciones notables en la defensa de la democracia, los derechos humanos y la libertad. Monseñor Álvarez, quien fue obispo de la Diócesis de Matagalpa y Estelí en Nicaragua y ahora vive en el exilio, se une a una lista de distinguidos galardonados, que incluye a Luis Almagro, secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA); la Iniciativa Democrática de España y las Américas (IDEA); Iván Duque, ex presidente de Colombia; el Parlamento Europeo; y Carl Gershman, ex presidente de la Fundación Nacional para la Democracia. Su inclusión en este prestigioso grupo es un reconocimiento a su valentía, integridad y dedicación inquebrantable a la promoción de los derechos humanos y los valores democráticos en Nicaragua.

Monseñor Álvarez ha sido una figura destacada en la lucha contra la represión del régimen de Daniel Ortega. Desde su posición como obispo, ha denunciado públicamente las violaciones de derechos humanos y ha defendido a los más vulnerables, organizando vigilias y manifestaciones pacíficas, así como proporcionando refugio a los perseguidos. Su firmeza y valentía lo han convertido en un símbolo de resistencia para los nicaragüenses y para todos aquellos que luchan por la justicia y la libertad en América Latina.

Monsenor Alvarez regesa a la modelo
Monseñor Rolando Álvarez mientras estaba en detención, durante su audiencia judicial | Fotografía de El 19 Digital

En 2022, Monseñor Álvarez fue arrestado y encarcelado por sus denuncias contra el gobierno nicaragüense. A pesar de las presiones y las difíciles condiciones de su encarcelamiento, rechazó la oferta del régimen de Ortega-Murillo de destierro y apatridia a cambio de su liberación, demostrando así su inquebrantable compromiso con su país y su gente. Su negativa a abandonar Nicaragua a pesar de las amenazas y la persecución es un testimonio de su profunda fe y su amor por su patria.

“Monseñor Álvarez es un símbolo de coherencia y coraje frente a la opresión. Su defensa de los perseguidos de Ortega es una inspiración no solo para todos los nicaragüenses, sino también para aquellos que luchamos por la libertad y la justicia en todo el mundo”, declaró Rosa María Payá, hija de Oswaldo Payá y directora ejecutiva de la Fundación para la Democracia Panamericana. Estas palabras resuenan profundamente en un contexto donde la represión y la violación de los derechos humanos continúan siendo una realidad para muchos en Nicaragua.

Yunova Acosta, presidenta del Comité Directivo de JuventudLAC, también destacó la importancia del galardón en su declaración: “Su valentía es un faro de esperanza para todos los que luchamos por ver una América Latina y un mundo más justo, democrático y libre”. Estas declaraciones subrayan el impacto de la labor de Monseñor Álvarez no solo en Nicaragua, sino en toda la región, donde su ejemplo sirve como un llamado a la acción y a la resistencia pacífica contra la tiranía.

La Red Latinoamericana de Jóvenes por la Democracia es una organización dedicada a promover y defender los valores democráticos en América Latina, trabajando para empoderar a los jóvenes y fomentar su participación activa en los procesos democráticos. A través de diversas iniciativas y programas, JuventudLAC busca formar una nueva generación de líderes comprometidos con la democracia y los derechos humanos.

Monseñor Rolando Álvarez, con su valentía y dedicación, encarna los valores que estas organizaciones buscan promover. Su reconocimiento con el Premio “Oswaldo Payá: Libertad y Vida” es un merecido homenaje a su incansable lucha por un Nicaragua libre y democrático, y una inspiración para todos aquellos que anhelan un futuro mejor para sus pueblos.