Monseñor Rolando Álvarez Lagos, Obispo de la Diócesis de Matagalpa, reapareció en la inauguración de la segunda sesión del Sínodo de la Sinodalidad que realiza en Roma del 3 al 7 de octubre.

En el Sínodo participan 368 delegados designados por el Papa Francisco y ha sido marcado por un emotivo encuentro entre Monseñor Álvarez y su hermano en la fe, Monseñor Javier Román Arias, Obispo de la Diócesis de Limón, Costa Rica.

En sus redes sociales, Monseñor Arias, compartió una fotografía en la que aparece junto a Álvarez y destacó su riqueza espiritual del obispo nicaragüense que en enero de este año fue desterrado a Roma por la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo, quienes lo encarcelaron en agosto de 2022.

“Un momento de mucha alegría fue poder saludar y abrazar a mi hermano Monseñor Rolando Álvarez, Obispo de Matagalpa, Nicaragua, quien actualmente reside en Roma. Con él compartiremos la misma mesa de trabajo, lo cual será sin duda una riqueza y un regalo de Dios”, escribió el obispo costarricense.

Piden perdón por pecados de la humanidad

Arias explicó que en las plegarias, junto a su hermano en la fe, pidieron perdón por los pecados cometidos por la humanidad que atentan contra la paz del mundo y contra las personas, principalmente por aquellos pecados cometidos contra las mujeres.

También destacó la importancia de la participación de su hermano en la fe en la Sínodo que fue convocado por iniciativa propia del Papa Francisco, para identificar los problemas actuales que enfrenta la Iglesia y buscar una alternativa espiritual.

“En nuestro corazón llevamos las reflexiones y oraciones de los días previos y en particular las peticiones de perdón leídas ayer durante el acto penitencial”, agregó el purpurado costarricense en sus redes sociales.

“Pedimos nuevamente perdón por los pecados contra la Paz y la creación, los pecados de abuso, aquellos contra las mujeres, cuando hemos usado el evangelio para herir, por el pecado contra los pobres y contra la Iglesia sinodal”, expresó Monseñor Román Arias, quien junto a Álvarez ha pedido perdón por los pecados cometidos contra la Iglesia y la humanidad.

¿Cómo se preparó el Sínodo?

El Sínodo fue convocado por iniciativa del Papa Francisco en el año 2022, cuando todas las diócesis en del mundo, identificaron cada uno de los problemas que enfrenta la Iglesia en su vida pastoral, los que fueron consensuados, anotados y además plantearon las posibles soluciones.

Una vez que los problemas fueron identificados, fueron enviados al obispo de cada diócesis, donde posteriormente, los prelados mediante una reunión colegiada, analizaron las dificultades y prepararon un documento final que hicieron llegar al Vaticano, para su debate en el próximo Sínodo.

Este Sínodo de la Sinodalidad que viene trabajando la Iglesia desde hace dos años, podría dar paso a un nuevo concilio donde se espera que haya reformas dentro de la Iglesia para mejorar la vida pastoral y espiritual.