En una entrevista a la cadena Fox News, el expresidente y candidato republicano, Donald Trump, amenazó con que, si gana las elecciones presidenciales de noviembre próximo, va a deportar a ciudadanos de Nicaragua, Cuba, Venezuela y Haití, aunque estos hayan sido admitidos en Estados Unidos a través del programa del parole humanitario.
El candidato republicano agregó que también cerrará la aplicación CBP One, que los migrantes utilizan para pedir citas en la frontera. Según él, esta aplicación es “mala” y el programa de parole es “peor” porque permite a las personas llegar en avión.
El programa de parole, que comenzó a finales de 2022 y luego se amplió a otros países, ha permitido la entrada de casi medio millón de migrantes a EE. UU., de los cuales unos 90,000 son nicaragüenses. Este programa permite la entrada de hasta 30,000 personas al mes de esos países y les otorga un permiso de trabajo por dos años.
Siendo así, es importante recordar que quienes reciben el parole tienen estatus legal para estar en Estados Unidos por dos años, Trump los llamó “inmigrantes ilegales” y afirmó que no deberían estar en el país. Además, amenazó con que se preparen para irse, especialmente si son criminales, en caso de que gane las elecciones contra la vicepresidenta Kamala Harris el 5 de noviembre.
El candidato de los republicanos ha puesto la migración en el centro de su campaña y ha aumentado su discurso antiinmigrante, incluso difundiendo rumores extraños sobre haitianos en Ohio.
No importa si están legales
Y es que a pesar de que las personas con parole humanitario cuentan con estatus legal para estar en Estados Unidos durante dos años, el expresidente dijo que son “inmigrantes ilegales” que no deberían estar en el país.
“Que se preparen para irse, especialmente si son criminales”, amenazó Trump en caso de ganar las elecciones del 5 de noviembre a la vicepresidenta y candidata demócrata, Kamala Harris.
El programa de parole humanitario, que comenzó a finales de 2022 solo para ciudadanos venezolanos y luego se amplió para incluir a nicaragüenses, cubanos y haitianos, ha permitido la entrada de casi medio millón de migrantes a EE. UU., según datos del Departamento del Seguridad Nacional de Estados Unidos (DHS, por sus siglas en inglés)
El Departamento de Seguridad Nacional había suspendido el programa para investigar las preocupaciones, pero indicó que una revisión interna no encontró ningún fraude generalizado entre los patrocinadores.