El nueve de febrero del 2023 la vida cambió para la exrea y desterrada política Julia Hernández, originaria de Masaya, luego que el régimen de Daniel Ortega la desterró a Estados Unidos, junto a otros 223 nicaragüenses.

A un año de estar en tierras norteamericanas, la joven opositora afirmó en entrevista exclusiva a Darío Medios Internacional que ha sido difícil poder adaptarse para sobrevivir y salir adelante en «un país donde estamos prácticamente solos».

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La soledad que acompaña a la opositora de 35 años se ve reflejada en los más de tres años que no ha podido ver a su hijo de 14 años, a quien estando e la cárcel (penal de mujeres «La Esperanza») solo lo vio en pocas ocasiones y ahora se comunica con él por vídeo llamada.

Julia Hernández ya había sido detenida ilegalmente el 30 de noviembre de 2019, señalada de cómplice en el caso de José Isaías Ugarte (Chabelo), pero fue puesta en libertad en diciembre del mismo año.

Julia Hernández, la desterrada y exrea política de Masaya que no ha podido reunirse con su hijo. Foto: Darío Medios / Cortesía
Julia Hernández, la desterrada y exrea política de Masaya que no ha podido reunirse con su hijo. Foto: Darío Medios / Cortesía

Sin embargo, el siete de enero de 2021 fue nuevamente detenida, pero esta vez le imputaron los supuestos delitos de tráfico de drogas y posesión ilegal de armas y municiones, excusa que Ortega ha utilizado para arremeter contra opositores.

Fueron esas supuestas causas que la condenaron a 18 años de cárcel y más de 50 mil córdobas de multa, impidiéndola no pode ver crecer a su único hijo, que cada día ansía poder estar junto a su madre.

Los impedimentos de Julia Hernández para no poder ver a su hijo

Con un trabajo de empacadora de galletas, Julia Hernández ha podido sobrevivir a destierro en Estados Unidos y ha ayudado a que a su hijo no le falte nada; sin embargo, los trámites para que su primogénito pueda viajar se han tornado difíciles.

«El problema principal para que mi hijo salga de Nicaragua ha sido principalmente por documentación, ya que a mi niño no le entregaron su pasaporte porque las autoridades aducen que le faltan requisitos. Es por eso que solo cuenta con su partida de nacimiento» explicó la declarada apátrida por la dictadura de Ortega.

Julia Hernández trabaja empacando galletas para sobrevivir en el destierro. Foto: Darío Medios / Cortesía
Julia Hernández trabaja empacando galletas para sobrevivir en el destierro. Foto: Darío Medios / Cortesía

Pese a los obstáculos para poder concretar la salida, Julia Hernández afirmó que no pierde la esperanza y que «con la voluntad de Dios se cumplirá mi sueño de estar con mi hijo, pero solo Dios lo sabe —cuando será el momento».

Un cumpleaños más de su hijo, sin poderlo celebrar

El 14 de febrero, el «chigüín», como suelen decirle a los niño en el barrio indígena de Monimbó, cumplió un año más de vida, una velita más que no pudo apagar por la lejanía de su madre.

«Mi hijo y yo somos muy unidos, nunca nos habíamos separado, esto nos causó daños emocionales y psicológicos. Ahora pido a mi Padre celestial que tenga misericordia de mí y poder estar con mi hijo», expresó.

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A la vez señaló que la distancia ha provocado en su hijo un desaliento y hasta ha perdido la esperanza de poder reunirse con su progenitora.

«Yo no me quedo de brazos cruzados, he hecho varias gestiones para que mi bebé salga de Nicaragua, pero aún no se ha concretado. Cuando caí presa lo dejé de 11 años, ahora tiene 14 y no deseo que pase el tiempo y no pueda verlo jamás», agregó Julia Hernández.

El sueño de Julia Hernández

Aunque el régimen de Ortega declaró apátrida a la joven opositora, originaria de Monimbó, está dijo con aplomo que sigue siendo nicaragüense que «con la ayuda de Dios» logrará poder llegar a un Nicaragua en democracia.

«Yo y otros 221 exreos políticos sufrimos un destierro injustificado solo por demandar y querer un país en libertad, pero tarde o temprano seremos libres y volveremos a nuestra tierra porque nadie nos puede arrebatar nuestra nacionalidad», concluyó la desterrada política.

Además de Julia Hernández, este medio de comunicación supo que otras exreas políticas, como Karla Escobar y María Esperanza Sánchez no ha podido reunirse con su hijos, sin embargo, siguen sin perder l esperanza de romper las barreras que impiden el rencuentro familiar.