Edward Gaitán Gallegos, quien el pasado 25 de septiembre se declaró culpable de asesinar a su hermanito de 7 años, en el municipio de Catarina, en el departamento de Masaya, fue condenado a cadena perpetua “revisable”.

La sentencia fue emitida esta mañana por el doctor Norman Andrés Durán Chávez, titular del Juzgado Distrito Penal de Juicio de Masaya, mediante notificación electrónica.

El condenado deberá cumplir la sentencia en el Sistema Penitenciario Jorge Navarro, conocido como “La Modelo”, ubicada en el municipio de Tipitapa lugar donde enfrentó el proceso bajo la medida cautelar de prisión preventiva.

La notificación detalla que las partes tienen derecho a apelar la sentencia en los términos establecidos por la ley, es decir, que Ricardo Flores, abogado de defensor del condenado, tiene hasta el próximo martes 8 de octubre, para solicitar la revisión de la condena.

En el fallo, el juez establece que la condena impuesta a Gaitán, será revisable cuando cumpla 30 años en prisión, donde en dependencia de su buen comportamiento, los magistrados decidirán si el sentenciado podrá salir libre o se le rebaja la pena.

Edward Gaitán solo podría solicitar la revisión de su condena hasta que cumpla 30 años en prisión; cuando él tenga 51 años de edad, hasta el año 2054.

Crimen consternó a los nicaragüenses

La acusación del Ministerio Público detalla que la tarde del pasado 18 de agosto, en el barrio Mario Latino, en Catarina, Masaya, Edward Gaitán Gallegos llamó a su habitación a su hermanito Hollman Gaitán, de 7 años.

Acto seguido, lo golpeó con una piedra en la cabeza, le tapó la nariz y la boca y luego lo estranguló. Posteriormente cubrió la cabeza del pequeño con una camiseta roja y metió el cuerpo en bolsas plástica, y lo colocó debajo de su cama.

La mañana del 19 de agosto, el cuerpo del infante fue encontrado en la habitación de Edward Gaitán, por agentes policiales a cargo de la investigación.

Por este caso, Edward Gaitán Gallegos, de 21 años fue acusado y procesado por Parricidio Agravado; delito por el cual el Ministerio Público solicitó que se le impusiera la condena de Prisión Perpetua Revisable, al considerar que se trataba de un crimen de odio.

Tras reportarse como desaparecido por sus familiares, los pobladores del municipio se dedicaron a la búsqueda del menor y pasaron la noche en vela, hasta que el cuerpo fue localizado por los agentes policiales.

El caso que conmocionó a los nicaragüenses, llamó la atención de la sancionada vicepresidenta Rosario Murillo, quien se refirió al caso, exigiendo justicia y pidiendo a funcionarios de su régimen que implementen medidas de prevención para evitar crímenes a manos de adolescentes.