Los católicos de la diócesis de Matagalpa están contentos de ver que su obispo, monseñor Rolando Álvarez Lagos, se recupera del encarcelamiento que sufrió. En estos días, el purpurado se ha dejado fotografiar en el Sínodo de la Sinodalidad que se realiza en Roma.

Desde que fue desterrado a Roma, junto a monseñor Isidoro Mora y otras sacerdotes del gobierno eclesiástico de la arquidiócesis de Managua, Álvarez ha dejado las redes sociales y ha guardado silencio sobre la difícil situación que vivió en las celdas del régimen.

“Lo vemos muy sereno. Nos alegra que participe en ese Sínodo que fue convocado por el Papa Francisco. Qué mejor manera que sea el mismo monseñor Álvarez quien cuente los problemas que atraviesa la Iglesia Católica en Nicaragua”, comentó a Darío Medios Internacional una feligrés de la catedral de Matagalpa.

La mujer, quien conoce a monseñor Álvarez, dice que las fotografías son un mensaje que el purpurado manda a los feligreses, quienes no han dejado las plegarias por su obispo, a quien califican como un hombre lleno del Espíritu Santo, por la valentía con que defendió a la Iglesia.

“En esas fotos que él se está dejando tomar, nos está mandando un mensaje de que está bien y que sigamos orando. Esas fotografías donde su rostro se ve afectado, nos invita a seguir orando por él y por su ministerio y sobre todo, por esta misión que Dios le encomendó que es participar del Sínodo de la Sinodalidad”, expone otro de los feligreses.

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Imágenes del medio católico Desde la Fe

Feligreses mantienen oraciones por su obispo

Desde que monseñor Álvarez fue secuestrado por la dictadura, los feligreses han incrementado sus plegarias por la Iglesia y por la conversión del dictador Daniel Ortega, y de su esposa, la sancionada Rosario Murillo, vocera del régimen.

“La Iglesia siempre va a orar por quienes la persiguen. Eso está escrito en la Biblia, que habrá quienes la ataquen, pero Dios siempre va a estar con ella. La Iglesia nunca va a responder con odios porque Dios está con nosotros”, señaló un sacerdote matagalpino que pidió el anonimato por estar dentro del país.

“La Iglesia es madre y misericordiosa, que el día que el dictador se muera y soliciten una misa, la Iglesia lo recibirá y le dará su perdón. Es tonto el que cree que la va a desaparecer, por mucho que sea el poder o la fuerza que tenga, no hay que temer, porque tan solo es un hombre”, agregó el sacerdote.

Desde que fue desterrado, monseñor Rolando continúa siendo el obispo de Matagalpa, lo que “llena de satisfacción” a sus feligreses, quienes resienten la ausencia de la voz profética de su obispo.

Imagen y foto de portada del medio católico Desde la Fe