A cinco días que inicien los rezos de la noven en honor a la Inmaculada Concepción de María, católicos llevan a retocar la imagen de La Purísima, para engalanarla y gritarla este próximo 7 de diciembre.
La Iglesia Católica celebra en el mundo todos los 8 de diciembre el dogma de la Inmaculada Concepción, pero en Nicaragua, los católicos lo celebran de una forma muy exclusiva, porque un día anterior, la tarde del 7 de diciembre, los devotos celebran La Gritería, donde los promesantes que la gritan, intercambian dulces por cantos a la virgen.
De acuerdo con los escultores, las reparaciones de las imágenes de “La Conchita” –a como la llaman los feligreses-, crece en estos días, previo a las fiestas marianas que enorgullecen a los católicos de Nicaragua.
“Siempre para estas fechas nos saturamos. Por lo general, las personas que tienen la promesa de gritarla traen su imagen de La Purísima para ser retocadas porque con el paso de los años pierden parte del color o sufrieron algún daño”, señaló a Darío Medios Internacional un escultor del departamento de León, en el occidente de Nicaragua.
Según el escultor, quien heredó el arte por medio de su abuelo paterno, señaló que los devotos son bien exigentes en cuanto a los retoques o reparaciones.
“La gente nos exige que la parte de los ojos quede nítida, bien pintadita. Siempre que las entregamos se fijan en los detalles de la boca y las cejas”, agregó el escultor.
Imagen de La Purísima son de antaño
El hombre, quien lleva más de 50 años retocando la imagen de La Purísima, explicó que la mayor parte de estos símbolos religiosos que representan a la virgen María, la madre de Dios, son de antaño.
“He tenido en mis manos imágenes de hasta más de 100 años. Hay personas que cuando tienen este tipo de imágenes y se les dañó, lo único que piden es restaurarlas, pero no pintarlas para que conserven la originalidad”, expuso el hombre mientras fija su pincel a una imagen.
Las afirmaciones de este escultor religioso son sustentadas por doña Gloria Lejarza, quien este viernes llevó “con carácter de urgencias” a reparar su imagen de La Purísima que le heredó su bisabuela en su lecho de muerte, hace más de 50 años.
“Esta imagen es una reliquia, todos los años la grito. Mi mamita Libertad me la dejó de herencia cuando estaba por fallecer y me pidió que siempre la gritara. Esta imagen tiene más de 100 años, porque mi abuelita murió hace 60 años y dice que su mamá se la dio de regalo cuando mi mamita cumplió 15 años de edad”, compartió doña Gloria.
“Según las palabras de mi mamita (bisabuela), su mamá se la regaló a ella cuando cumplió 15 años, le dijo que siempre le pidiera a la virgen protección. La verdad que tengo vagos recuerdos de mi bisabuela porque ella murió cuando yo tenía 5 años”, agregó.
Este 28 de noviembre, la Iglesia Católica nicaragüense inicia la novena a la Inmaculada Concepción de María, considerada por los católicos como la patrona de Nicaragua, una fiesta religiosa que se celebra a nivel nacional.