Como una desaparición forzosa está calificado por organismos de derechos humanos el secuestro político del líder indígena Brooklyn Rivera, quien fue detenido el 29 de septiembre de 2023 en su casa de habitación en el Caribe de Nicaragua.
Desde ese entonces se desconoce su paradero. “La familia y amigos hemos buscado en todos los lugares posibles y lo único que la policía nos ha dicho es que está a mano de la presidencia y que ya no volviéramos a preguntar nada sobre él porque el que lo haga va a ir preso”, comentó Tiniska Rivera activista indígena e hija de Brooklyn en abril de este año.
En ese momento también expresó que durante los primeros siete meses de prisión de su padre la policía les dijo que estaba muerto.
“Como tres veces en siete meses de arresto que tiene mi padre, nos han dicho que ha fallecido. Yo creo que esas noticias falsas son del mismo gobierno para preocupar a la familia y a la población en general” expresó visiblemente preocupada Rivera.
Manifestó que esto es una forma de violentar a la familia de manera psicológica, “Que te digan de repente que tu papá está muerto, es increíble. La primera vez fue demasiado impactante para mí. Estuve una semana llorando, no sabía qué hacer y no había forma de investigar esa noticia”.
Denunció complicidad de la dictadura con los colonos
La detención del líder y exdiputado Rivera se registró seis meses después de que participó en el Foro Permanente sobre asuntos indígenas en Naciones Unidas. Su ‘delito” fue haber denunciado en ese foro la situación desoladora que viven los pueblos indígenas y que el Estado de Nicaragua no ha intervenido en dichos conflictos que mantienen con los colonos.
En el último periodo de sesiones de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), la hija del líder indígena Tiniska Rivera, aprovecho el espacio otorgado para denunciar que, el Estado de Nicaragua está anulando la autonomía indígena otorgando recursos a extranjeros y dejando en total vulnerabilidad a la comunidad que hoy es víctima de abuso e invasión, lo que podría amenazar su territorio desde un etnocidio.
Sobre la captura y desaparición de Rivera, no ha habido pronunciamiento oficial, en tanto las autoridades judiciales tampoco han dado a conocer los cargos contra el exaliado del oficialismo después de ser secuestrado.
Sus familiares han metido más de ocho recursos de amparo ante el poder judicial orteguista para que lo presenten físicamente y conocer su estado físico y mental, pero hasta la fecha no ha habido ningún tipo de repuesta.