El cese al fuego entre Israel y el grupo libanés Hezbolá entrará en vigencia a las 04:00 hora local (0200 GMT) del miércoles después de que ambas partes aceptaran un acuerdo negociado por Estados Unidos y Francia, dijo el martes el presidente estadounidense Joe Biden.

El acuerdo, que allana el camino para poner fin al conflicto de Gaza, que ha matado a miles de personas desde que se inició el año pasado, fue diseñado para ser un cese permanente de las hostilidades, dijo Biden desde la Casa Blanca.

El alto el fuego, mediado por Estados Unidos, marcaría el primer paso importante hacia el fin de la inestabilidad regional desencadenada por el ataque de Hamás a Israel del 7 de octubre de 2023. Pero no aborda la devastadora guerra en Gaza, un conflicto más difícil de resolver.

“Se trata de un cese permanente de las hostilidades”, señaló el mandatario. “No se permitirá que lo que queda de Hezbolá y otras organizaciones terroristas vuelva a amenazar la seguridad de Israel”.

El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, dijo previamente el martes que estaba dispuesto a aplicar el acuerdo y que “respondería enérgicamente a cualquier violación” por parte de Hezbolá.

Israel retirará gradualmente sus fuerzas durante un periodo de 60 días mientras el Ejército libanés toma el control del territorio cercano a su frontera con el Estado judío para asegurarse que Hezbolá no reconstruya allí su infraestructura, dijo Biden.

“Los civiles de ambas partes podrán regresar pronto a sus comunidades en condiciones de seguridad”, afirmó.

El primer ministro interino de Líbano, Najib Mikati, dio la bienvenida al alto el fuego y lo describió como un paso crucial hacia la estabilidad y el retorno de las personas desplazadas.

Biden afirmó durante el anuncio que no habrá intervención de tropas estadounidenses y que en los próximos días Estados Unidos buscará junto a Turquía, Qatar y otros países el cese al fuego en Gaza.

Ataques del martes

A pesar del avance diplomático, Israel lanzó oleadas de ataques aéreos en Beirut y otras partes del Líbano el martes, y las autoridades sanitarias reportaron al menos 18 muertos.

No había indicios de que una tregua en el Líbano pudiera acelerar un acuerdo de alto el fuego y liberación de rehenes en Gaza, donde Israel lucha contra el grupo militante palestino Hamás.

El ministro libanés de Asuntos Exteriores, Bou Habib, dijo que el ejército estaría preparado para desplegar al menos 5.000 soldados en el sur del Líbano cuando se retiren las tropas israelíes, y que Estados Unidos podría desempeñar un papel en la reconstrucción de las infraestructuras destruidas por los ataques israelíes.

Israel exige el cumplimiento efectivo por parte de la ONU de un eventual alto el fuego con el Líbano y mostrará “tolerancia cero” ante cualquier infracción, declaró el martes el ministro de Defensa, Israel Katz.

Aviones de combate israelíes lanzaron repetidos ataques en Beirut a lo largo del martes, principalmente en los suburbios del sur, bastión de Hezbolá.

Un único grupo de ataques en Beirut, que según el ejército israelí incluyó incursiones contra 20 objetivos en sólo 120 segundos, dejó al menos siete muertos y 37 heridos, informó el Ministerio de Sanidad libanés.

Tomada de la Voz de América